Con algunas excepciones, las pequeñas y medianas empresas del Estado Lara experimentaron en el 2022 un crecimiento estimado en un 25 por ciento, con relación al año 2021.
En una amplia nota de prensa, así lo hace constar el presidente de la Cámara de la Pequeña y la Mediana Industria del Estado Lara (Capmil-Lara), Marco Teixeira.
Entre los sectores en crecimiento, citó el dirigente empresarial la agroindustria, los alimentos de consumo masivo, las empresas plásticas de bolsas y envases para la industria alimentaria, y las industrias químicas de cosméticos del hogar.
Admitió, sí, que, en lo que al sector industrial se refiere, lo relacionado con el café, aun cuando también mejoró, solamente llegó al 12 por ciento con respecto al año 2021.
Y, yendo un poco más allá, también tuvieron poco crecimiento –dijo– los sectores metalmecánico, metalúrgico y textiles, cuya recuperación no fue la esperada.
Ante una pregunta, apuntó que, a su juicio, fueron varias las razones que contribuyeron a frenar o a disminuir el crecimiento empresarial en esta entidad federal.
Una de ellas, precisó, fue el entorno macroeconómico en el que se ha desarrollado el año 2022, con su carga de inflación, de control de cambio y variación brusca de la tasa de cambios.
Pero también contribuyeron –aseveró— las imposiciones fiscales del sistema tributario, y las parafiscales, al igual que el incremento de los impuestos municipales, en algunos casos desproporcionados.
Quiso destacar aparte Teixeira el “deficiente Servicio de Aseo Urbano y Domiciliario en Barquisimeto, que, por cierto, sigue siendo el punto crítico dentro de las conversaciones entre los gremios empresariales y las autoridades municipales iribarrenses”.
Reinaldo Gómez