Noruega destinará en calidad de préstamo todas sus 216.000 dosis de la vacuna de AstraZeneca contra el coronavirus a Suecia e Islandia siempre mientras el regulador de su propio gobierno mantenga suspendido el uso de la vacuna.
El 11 de marzo, Noruega siguió los pasos de Dinamarca al decidir frenar la aplicación de la vacuna de la compañía británico-suiza luego de reportes de coágulos sanguíneos muy inusuales.
El ministro de Salud, Bent Hoeie, dijo que en caso de que el uso de la vacuna de AstraZeneca se reanude, “recibiremos de vuelta las dosis que prestamos en cuanto lo solicitemos”.
La Agencia Europea de Medicamentos ha señalado que los beneficios de ser inmunizados contra el COVID-19 superan los riesgos muy inusuales de desarrollar coágulos poco comunes relacionados con la vacuna de AstraZeneca.
Hoeie agregó que en caso de que la vacuna sea retirada del programa de vacunación contra el coronavirus en Noruega, país que no forma parte de la Unión Europea, “las dosis que hemos dado pueden ser donadas a otros países en colaboración con la UE”.
Hoeie detalló que Suecia recibirá en préstamo 200.000 dosis e Islandia 16.000 dosis. Las dosis otorgadas por Noruega a préstamo caducan en junio y julio. El gobierno danés, el primero en suspender el uso de la vacuna de AstraZeneca, aún no ha decidido qué sucederá con sus dosis.
Si bien el Instituto Noruego de Salud Pública ha hecho un llamado para retirar la vacuna de AstraZeneca del programa de vacunación del país, el gobierno de Noruega decidió este mes seguir a la espera, señalando que cree “que no contamos con bases buenas suficientes para llegar a una conclusión definitiva”.
Hoeie reiteró que los expertos en Noruega deberán evaluar el uso de las vacunas de AstraZeneca y de Johnson & Johnson antes del 10 de mayo. Ambas vacunas se producen con la misma tecnología.