Al menos 200 personas, entre jubilados y pensionados se reunieron en la Plaza Altagracia, ubicada en el centro de Barquisimeto, para marchar hasta la sede de la Inspectoría del Trabajo del estado Lara, e introducir un documento dirigido a la OIT y exigirle “que se deje de tecnicismos” y atienda sus necesidades.
El sector salud, educacional y obrero, fueron algunos de los gremios que se congregaron para exigir la restitución de sus derechos y continuar denuncian que el actual salario establecido por el Gobierno Nacional “no les alcanza para nada”.
“Un trabajador necesita en promedio 330 bolívares semanales para comer, hoy recibe escasos 30 bolívares, una situación dramática, un genocidio en cámara lenta” expresó Robert Sánchez, secretario general del Sindicato de Empleados Públicos del Ejecutivo del Estado Lara (SEPEEL), al denunciar que esta cifra no logra cubrir las necesidades básicas de un ciudadano.
“Nuestros abuelos, nuestros trabajadores, que dieron parte de su vida al país, hoy siguen pisoteando sus derechos. Ellos están en una situación miserable” expresó Sánchez y añadió que esto ocurre ante la “inobservancia del Gobierno Nacional, que poco o nada le importa la situación de los trabajadores, de los jubilados y mucho menos los pensionados”.
Indicó que con esta marcha, replicada en todos los estados del país, los casi cinco millones de jubilados y pensionados en Venezuela, le dicen a la comisión de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que visita al país, “que ya no queremos más tecnicismos, no queremos más ensayos de diálogos, aquí los diálogos han sido inútiles”.
Expresó que este es el momento, para que los movimientos sindicales se levanten y le exijan al ente, que dicte resoluciones concluyentes “ya basta de tanta burocracia, de tantos viajes al país, y que solamente terminan en fotos, unos encuentros amistosos” sentenció el dirigente.
