Neicary Albarrán- Familiares de Mario Alejandro y Juan Ernesto Merentes Alfonzo, asesinados el pasado 1ero de noviembre presuntamente por Ivanhoe Rangel Ledesma, rompieron el silencio y en exclusiva para el diario EL INFORMADOR, aseguraron haber introducido una causa en los Tribunales del Estado Lara, para exigir el traslado del ahora investigado desde el Cuerpo detectivesco Cicpc, hasta el Centro Penitenciario David Viloria.
Según la esposa de Mario Merentes y la madre de los dos fallecidos, quienes por temor no quisieron revelar sus nombres, detallaron que en la audiencia de presentación de Rangel Ledezma, el juez ordenó el traslado en un lapso de 45 días hacia la cárcel David Viloria, mientras se realizaban las investigaciones, sin embargo dicho periodo de tiempo se venció el 21 de diciembre y aún el imputado se encuentra en los calabozos de la base de Secuestro del Cuerpo de Investigaciones científicas penales y Criminalísticas (Cicpc), ubicada al este de la ciudad de Barquisimeto.
Por el caso, Fiscalía también insertó una causa-querella- para respaldar a los familiares. «Queremos que sea penado y sea trasladado a Uribana», detallaba la madre.
Señalan, que el caso va muy pausado «El proceso esta lento, nosotros hicimos hasta ahora lo que nos compete, pero aún creemos en la justicia de este país» manifestaba la viuda.
Dudas que atormentan
51 días han pasado desde aquella «trágica» tarde, cuando la esposa de Mario recibió una nota de voz a las 6:30 p.m enviada por el mismo aparentemente malherido donde daba su ubicación.”Aún no entiendo por qué ese hombre hizo eso, fue tan innecesario, tan injusto» recalcó cabizbaja.
Ese día a las 4:00 p.m la esposa llevo a Mario a donde su hermano, porqué le dijo que se reuniría con ‘Iván’, aunque no lo conocía, a ella no le causo intriga tal cita, mientras que Juan le dijo a la madre y a su novia que el hombre les iba a enseñar sus nuevas oficinas.
Según el recorrido del vehículo, todo apunta que fueron primero a la Torre Delta, lugar donde el supuesto homicida tiene sus despachos y cómodamente los atendió, luego se fueron los tres en el carro hasta la vivienda- Ivanhoe habría dejado su vehículo en el estacionamiento del edificio-.
Aunque la dama se mantenía en comunicación con su esposo, 20 minutos después recibió el mensaje, que en un principio creyó que se trataba de una broma, ya que dudaba si era la voz de Mario.
Las alarmas se encendieron en la familia, ella y su suegra acudieron inmediatamente a los entes de seguridad. El hermano mayor de los fallecidos obtuvo la ubicación del carro de Juan; el GPS arrojaba que estaban en la carrera 27 con calle 13 y 14, pero luego de varios minutos rondando la zona, el joven no lograba verlos, al parecer el vehículo estaba dentro de la vivienda en construcción donde fueron, horas más tarde desenterrados por el eje de Homicidios.
La viuda y madre detallaron que luego la ubicación del vehículo cambió, aunque no precisaron los recorridos siguientes, se conoció por fuentes policiales que Ivanhoe tuvo que haber salido de la casa luego de presuntamente dispararles y enterrarlos abordo del carro, que luego dejó abandonado en la calle 51 con Av. Libertador.
Horas de desesperación
La familia entre el desespero, tenían que cumplir las horas de protocolo para determinar si era un secuestro. El hermano para agilizar el proceso, llevo hasta la sede del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro CONAS Lara, la computadora donde se reflejaban los lugares por donde transitaron.
A la par, el Cicpc dio con la casa del presunto asesino en la urbanización El Amanecer de Cabudare donde se encontraba con su esposa. Los parientes creen que el hombre aproximadamente a las 2:00a.m empezó a confesar, donde aseguró haber actuado sólo.
«Yo como madre, siento que ese hombre no pudo actuar sólo, nos dicen que todo lo hizo en una hora, es imposible» declaraba con desespero la mamá de los ultimados.
Pero a las 7 a.m aproximadamente llamaron a la pareja para que declarara en la base de Secuestro y allí le informaron el trágico hecho.
Los días pasan y el dolor no parece irse de sus vidas, confiando en los procedimientos penales y judiciales venezolanos, la madre y viuda detallaron continuar y hacer todo lo que esté en sus manos a fin de que se haga justicia.
JUSTICIA PARA MARIO Y JUAN !!! Un caso asi no puede quedar impune….
Justicia para los hermanos Merentes. Un asesinato sin lógica alguna.