Cardenales de Lara con sólo ganar dos juegos clasifica a la postemporada. Es lo que esperan de manera ansiosa los aficionados. Los que sufren las derrotas. No duermen bien y se desvelan. Pero cuando triunfan celebran, llaman a los que no son cardenaleros y los fastidian. Se acuestan bien tarde, porque entonces festejan las victorias. Así son los fanáticos. Aquellos que lloran los reveses y disfrutan las conquistas, como el de anoche contra Navegantes del Magallanes 4-1 en Barquisimeto. ¡Que viva Cardenales!
El equipo crepuscular previamente había perdido 11 en sus últimos 14 partidos. Ahora, en cambio, se encuentra a un juego para asegurar jugar sobre los .500. La serie particular con Magallanes terminó igualada 3-3. Una pugna muy interesante, donde ninguno de los dos bajó la guardia y se demostró que no hay enemigo chiquito, porque en realidad ambos elencos son batalladores y en choques cerrados nunca se sabe. En especial porque el conjunto larense ha exhibido una gran garra en la pelota local.
Magallanes acumulaba cinco triunfos en los últimos seis juegos y en diciembre presenta registro de 9-5. De paso su mánager el ‘Che’ mexicano Enrique Reyes dijo que en las fechas navideñas se queda en Venezuela. Le gusta el béisbol que se juega aquí, el calor de las tribunas con gente entusiasmada y la pelota caribe que muchos jugadores dejan ver en momentos apremiantes: salir con el batazo, tocar la bola si la tercera está lejos, engañar al pítcher con una arrancada en falso, ir al robo de base cuando un corredor se halla en posición anotadora. Es la viveza criolla, que se hace sentir en cualquier estadio de la región: en Dominicana, Puerto Rico, México o Venezuela.
A David Martínez, en partido previo de los ‘pajaros rojos’, le dieron duro: 10 imparables y un jonrón en 5.1 innings. De paso lo madrugaron con cuatro anotaciones en el primer inning y permitió seis durante su labor en el morrito. El slugger bobareño Luis Jiménez despachó su jonrón 101 en la LVBP y todavía tiene la fuerza necesaria, para hacer caminar la bola lejos, sin olvidar que tiene el cuerpo y las muñecas para alcanzar el objetivo. Pedro Rodríguez relevó en el sexto y por espacio de 1.2 innings concedió dos incogibles sin regalar boletos ni abanicar a ninguno, lo que indica que ha empezado a entrar por el riel y es necesario cuando arranque la siguiente ronda.
Osman Marval, por Cardenales, batea .317 con ocho dobles, tres triples y un cuadrangular, para 24 empujadas y 18 anotadas, mientras el viernes promediaba .328 después de conectar de 3-2, que incluyeron un tubey y dos remolcadas. La escuadra centroccidental suma 38 errores en la estación, incluidos los dos últimos frente al Magallanes que lo hace aparecer quinto en ese apartado. El lanzador derecho Carfred España acaba de entrar en el roster, que es algo importante porque a partir de ahora todo el mundo lo es. El diestro Ángelo Palumbo, abridor frente a Navegantes en el Antonio Herrera Gutiérrez, es la tercera vez que llega a 5.0 episodios y en sus dos últimas aperturas redondea 11.0 entradas en blanco.
El receptor Oscar Hernández, por Magallanes, abandonó la lomita en el tercer capítulo por un espasmo en la pierna derecha y surgió cuando iba en carrera de segunda a tercera base, tras una conexión de dos almohadillas de Cade Gotta, informó el trainer Antonio Balleste, en tanto Arturo Nieto fue su reemplazo detrás del plato. La nave dejó atascado en bases a cinco corredores en posición anotadora. Josmil Pinto cortó cadena de cinco partidos con al menos un imparable, tras fallar en cuatro turnos.
El zurdo dominicano Eniery García, por el Caracas, viene de lanzar 5.0 entradas y aseguró su segunda victoria en la temporada, luego de conceder seis inatrapables, ponchar a cuatro, regalar cuatro boletos y dejar efectividad en 3.75. El outfielder Eduard Pinto, en partido del viernes, largó de 5-2 con tres empujadas, en tanto su compañero el infielder Leonardo Ferrini sonó de 4-2 que incluyó un triple, para tres remolcadas y dos anotadas. El pítcher zurdo Félix Carvallo sufrió fractura del quinto metacarpiano de su mano de lanzar, después de resbalarse en una práctica y caer sobre sí mismo, lo que es lamentable porque su trabajo era muy solvente.
El infielder Wilfredo Tovar, también de Leones, acaba de lograr acuerdo de ligas menores con Mellizos de Minnesota en Estados Unidos y ha sido sustituido por Argenis Raga, aunque aún permanece en el entorno del club melenudo. En 2013 debutó en las Grandes Ligas por intermedio de Mets de Nueva York y en 2019 también jugó arriba pero para Angelinos de Los Ángeles, a través del cual conectó .293 con ocho dobles, dos jonrones, 20 empujadas y 15 anotadas. El lanzador oriental Luis Peñalver, ícono del Caracas en la década los sesenta y setenta, jugó 15 temporadas para el equipo metropolitano. Luisito era como la misa dominical: todos los domingo estaba allí, era el cura, el montículo el altar y el Universitario su templo sacro, como bien definió en un reporte Andriw Sánchez Ruiz por la LVBP.
Antonio José Seijas/Liga Venezolana de Béisbol Profesional-LVBP