“Quienes de alguna manera estamos al frente de las Organizaciones No Gubernamentales en Venezuela (ONG) no nos oponemos a una regulación de nuestras actividades, sino al excesivo control que sobre nosotros se pretende imponer”.
Así lo declararon para El Informador Venezuela, Donaide Sánchez, coordinadora de la ONG Transoparencia Venezuela, y los doctores Nancy Rodríguez de Rodríguez, directiva del Colegio de Abogados del estado Lara, y Alexis Ramos, abogado en libre ejercicio de la profesión.
Los tres fueron expositores en un foro organizado en la mañana de este martes 23 de enero en un céntrico salón de conferencias de Barquisimeto, sobre el proyecto de ley que regula las organizaciones no gubernamentales.
Y, de manera muy especial, sobre aquello de “¿De dónde sacan tanta plata las ONG’s…?, tal como en varias oportunidades lo ha preguntado el diputado Diosdado Cabello, primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Los conferencistas reconocieron que, ciertamente, en otros países, el funcionamiento de las ONG’s se halla regulado por ley.
¿Control excesivo…?
-Pero una cosa –apuntaron- es que se pretenda regular nuestro funcionamiento, a lo cual no nos oponemos en absoluto, y otra muy distinta el control excesivo que se nos pretende imponer.
Al comentársele que si teNían conocimiento del contenido de dicho proyecto de ley, indicaron que todavía no se conoce formalmente.
-Pero es que ya ese proyecto de ley –añadieron– fue aprobado el año pasado en primera discusión, y hasta ahí llegó, ante la enorme resistencia, y también la preocupación, que el mismo generó a nivel de la ONG’s venezolanas
-Ahora puntualizaron-, “lo rescatan”, con la idea de -ahora sí- ponerlo en vigencia.
Criminalización
-Por cierto, parece que se nos quiere, además, penalizar o criminalizar por la simple razón de denunciar hechos moralmente criticables y rechazables, como actos de corrupción o de abusos de poder.
Apuntaron que, de igual forma, muchas ONG’s que se dedican a labores humanitarias en favor de los más vulnerables, como niños y ancianos desnutridos, o abandonados, y que reciben colaboración de diverso origen, pues verán extremadamente limitadas tales actividades.
La doctora Rodríguez, por cierto, citó el caso del Rotary Internacional, que recibe ayuda procedente de exterior, y no solamente en dinero, sino incluso en equipos.
Y se preguntó: ¿Hasta qué punto, entonces, el Rotary vería imitada su capacidad de aportar ayuda humanitaria, y, en este caso, quiénes serían los más perjudicados?
¿Y cómo se puede contrarrestar tal proyecto?,
-Bueno, es cierto que ya los máximos jerarcas del gobierno parecieran ir con todo hacia la aprobación de tal ley, pero resulta que todavía no la han aprobado, todavía no ha sido un hecho concreto.
-Por lo tanto, si el primer proyecto fue engavetado ante tal presión en contra, pues, ahora, debemos también ir hacia una cruzada similar, por llamarla de alguna manera, para tratar de obligar nuevamente que se eche por tierra tal proyecto.