El encargado de las negociaciones con Ucrania, Vladimir Medinsky afirmó el domingo 22 de mayo que Rusia está dispuesta a retomar los diálogos de paz con Ucrania, asegurando que se habían suspendido a causa de Kiev,.
Medinsky aseguraba que «Rusia nunca ha rechazado las negociaciones» por lo que estaba dispuesta a continuar el diálogo.
Sin embargo, para el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, Rusia tiene una política agresiva que justifica la necesidad de reforzar la seguridad europea.
Al respecto se pronunció el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, adviertiendo que «la militarización (de Europa) y los futuros suministros de armas a Ucrania no contribuyen a reforzar la seguridad y la estabilidad del continente europeo».
En su rueda de prensa diaria, Peskov cuestionó también a Borrell al considerar que «no es un apologista de los métodos diplomáticos de solución de problemas, a pesar del cargo que ocupa»
Armas: la gran preocupación
Un estudio aprobado la semana pasada por la Comisión Europea destacó asimismo que la «masiva» entrega de armas a Ucrania ha diezmado las existencias en Europa, lo que pone aún más en evidencia que «no está preparada» para defenderse en una «guerra convencional», un fenómeno que ha vuelto al continente.
El primer objetivo de la Unión Europea, señala, debe ser el de «reforzar las reservas armamentísticas», como sistemas de defensa aérea y antimisiles, y «reemplazar» el armamento soviético que tienen los países del este de Europa, antiguas repúblicas de la URSS.
Fuente: Agencias
Foto: AP