En Portugal la policía detuvo a al menos a 35 sujetos por formar parte de una red de trata de personas que explotaba a decenas de víctimas, tanto portuguesas como extranjeras, en campos agrícolas del país.
La Policía Judicial (PJ) lusa sospecha que los detenidos, con edades comprendidas entre los 22 y los 58 años, de nacionalidad extranjera y portuguesa, han cometido «crímenes de asociación criminal, tráfico de personas, blanqueo de capitales y falsificación de documentos, entre otros», explicó hoy el cuerpo en un comunicado.
Asimismo, informó de que la operación ha implicado a cerca de 400 efectivos (tanto de la PJ como de la Fiscalía), que han cumplido con 65 órdenes de búsqueda domiciliaria y no domiciliaria en varias ciudades de la región del Alentejo.
«Los sospechosos integran una estructura criminal dedicada a la explotación del trabajo de ciudadanos inmigrantes, en su mayoría, reclutados en sus países de origen, como Rumanía, Moldavia, India, Senegal, Pakistán, Marruecos, Argelia, entre otros, para venir a trabajar en explotaciones agrícolas en esa región», precisó la PJ.
Durante esta operación, la policía ha aprehendido «varios elementos probatorios» y ha logrado identificar a «decenas de víctimas».
El canal CNN Portugal añadió que los detenidos atraían a las víctimas bajo la promesa de que obtendrían alojamiento, condiciones de trabajo y salarios dignos, que después no se cumplía.