El Gobierno brasileño expresó este domingo su “condena más vehemente” contra los “actos de violencia” perpetrados en las fronteras de Venezuela con Brasil y Colombia.
Se trata de la primera reacción oficial mediante un comunicado del Gobierno de Jair Bolsonaro a los incidentes que ocurrieron el sábado en las fronteras, en el marco de la operación coordinada por varios países para introducir alimentos y medicinas.
Para Brasil, esos incidentes violentos son un “brutal atentado a los Derechos Humanos”, que “ningún principio de derecho internacional justifica remotamente y ante los cuales “ninguna nación puede callarse”.
En la frontera con Colombia se calcula que hubo al menos 285 heridos.
La Cancillería brasileña hizo un llamado a la comunidad internacional, “sobre todo a los países que aún no reconocieron” a Guaidó, “a sumarse al esfuerzo de liberación de Venezuela” y “exigiendo que cese la violencia de las fuerzas del régimen contra su propia población”.