El Gobierno de Venezuela ha manifestado su firme rechazo a la decisión de Brasil de vetar su ingreso al grupo de economías emergentes BRICS, calificando esta acción como un «gesto hostil» y una «agresión» a los intereses de la nación. Este pronunciamiento se realizó el jueves 24 de octubre a través de un comunicado emitido por la Cancillería venezolana.
En el documento, el gobierno venezolano argumenta que el veto de Brasil refleja el odio y la exclusión promovidos por los centros de poder occidentales, que buscan obstaculizar la participación de Venezuela en la organización. «Esta acción constituye una agresión a Venezuela y un gesto hostil que se suma a la política criminal de sanciones impuestas contra un pueblo valiente y revolucionario», se lee en el comunicado.
La Cancillería también subrayó que el veto reproduce las políticas del expresidente brasileño Jair Bolsonaro, quien mantuvo una postura similar durante su mandato. «A través de una acción que contradice la naturaleza y postulados de los BRICS, la representación de la Cancillería brasileña decidió mantener el veto que Bolsonaro aplicó a Venezuela durante años», puntualizó el comunicado.
El gobierno venezolano reafirmó su determinación de continuar su camino, asegurando que «ninguna artimaña o maniobra concebidas contra Venezuela detendrán el curso de la historia». Este rechazo se produce en un contexto de tensiones diplomáticas y políticas en la región, donde las relaciones entre Venezuela y Brasil han sido objeto de controversia.
