Nicolás Maduro informó que para agosto espera instalar en México un diálogo con todos los sectores de la oposición venezolana, que podría contar con la participación de representantes de los gobiernos de otros países, entre ellos Estados Unidos.
“Aspiro en el mes de agosto, temprano, poder instalar en México con la ayuda del gobierno de Noruega y posiblemente la participación de gobiernos del mundo… entre ellos Estados Unidos”, dijo Maduro en una entrevista difundida por la cadena regional Telesur.
Se “pudiera instalar en México una mesa de diálogo, negociación, paz y reconciliación con todas las oposiciones”, destacó sin mencionar directamente al grupo que encabeza Juan Guaidó.
“Estamos a punto ya” de instalar una mesa de negociación, indicó, destacando la labor de Noruega, que sirve de enlace entre los sectores en pugna en el país.
“Del 1 al 10, pudiéramos decir que hemos llegado al 9”, dijo, sin dar más detalles sobre las eventuales reuniones en la capital mexicana.
Maduro resaltó que entre los temas a discutir figura “una agenda de recuperación de Venezuela, una agenda de reencuentro, para que ellos ahí renuncien por escrito y de palabra vida a la violencia, al llamado al intervencionismo (extranjero), a las guarimba (bloqueo de calles), al intento de magnicidio” y juntos, “en una sola voz, exijamos el levantamiento de todas las sanciones y que se devuelva el oro, el oro que nos tienen secuestrado; que se devuelvan, que se devuelvan las cuentas” gubernamentales que se encuentran congeladas en la banca internacional”.
Washington congeló todos los activos del gobierno venezolano en Estados Unidos y prohibió a los estadounidenses hacer negocios con Caracas para presionar a Maduro a dejar el poder.
El gobernante venezolano, por su parte, rompió relaciones con Estados Unidos en el 2019, argumentando que Washington impulsa planes para desestabilizar su gobierno y derrocarlo./SYGA
Foto: Prensa Presidencial