El presidente de Chile, Gabriel Boric, expresó su apoyo al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y condenó las declaraciones de Nicolás Maduro, quien amenazó con «un baño de sangre» y una guerra civil, si no gana las elecciones presidenciales de este domingo 28 de julio.
El mandatario chileno destacó que los comicios deben decidirse con “un baño de votos”, y no con violencia.
“Lo que reciben los mandatarios y los candidatos son baños de votos y esos baños de votos representan la soberanía popular, que debe ser respetada”, dijo el jefe de Estado en un encuentro con corresponsales extranjeros.
Lula confesó este lunes que “se asustó” por las fuertes declaraciones de Maduro y, junto con Boric y el expresidente argentino Alberto Fernández, pidió un proceso electoral transparente y con garantías en Venezuela.
“En víspera de esta elección tan importante, formulo un llamado al gobierno y al poder electoral venezolanos a garantizar el normal desarrollo del proceso electoral, con garantías, en especial para la oposición, otorgando un irrestricto respeto a los resultados que sean debidamente acreditados”, declaró.
Boric enfatizó la necesidad de actuar en consenso con la comunidad internacional para asegurar el respeto a la soberanía popular.
Maduro, quien busca ser reelegido hasta 2030 y acumular 17 años como presidente, enfrentará al diplomático Edmundo González, candidato de la oposición y quien lo aventaja en las encuestas.
Si el chavismo no acepta los resultados, “Venezuela quedaría en una posición totalmente desacreditada ante toda la comunidad internacional”, afirmó el líder chileno.
Desde su llegada al poder en marzo de 2022, Boric mantiene una postura crítica hacia Maduro, diferenciándose de otros líderes “progresistas” de la región.
Fuente: Versión Final
Gráfica: Referencial
RG