El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, solicitó a Estados Unidos «apoyo» para atender el histórico flujo de migrantes irregulares que llega a este país centroamericano en su tránsito hacia Norteamérica, informó este martes el Gobierno.
Cortizo hizo este pedido durante una reunión con el senador demócrata Timothy Michael Kaine y el congresista Adriano Espaillat Rodríguez, con quienes abordó la mañana de este martes «temas de interés entre Panamá y Estados Unidos, en especial el flujo migratorio», dijo un comunicado oficial.
«Panamá es un país con pocos recursos y estamos apoyando con el regreso de venezolanos a su país. Solo en este año han pasado por Darién 206.000 migrantes, 170.000 de ellos venezolanos. Necesitamos apoyo de Estados Unidos», dijo el presidente panameño, según el comunicado.
Panamá es la puerta de entrada a Centroamérica desde el sur del continente. Miles de viajeros irregulares procedentes de todo el mundo llegan a este país tras atravesar el Tapón de Darién, la frontera natural con Colombia, una ruta migratoria de 266 kilómetros considerada de las más peligrosas del mundo.
Las autoridades panameñas ya están evidenciado una caída en las cifras de migrantes que llegan al país tras cruzar el Darién, como dijo este martes el jefe del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) de Panamá, Oriel Ortega.
Otro efecto de la medida estadounidense es que muchos venezolanos que estaban en tránsito irregular están optando por regresar a su país. En la capital panameña, un albergue temporal instalado por la misión diplomática de Venezuela está acogiendo a un creciente número de estas personas.
Fuente: 0800 Noticias