Ante un posible escenario de referendo revocatorio, para 2022, El Informador Venezuela conversó con el analista político José Gregorio Zaa, quien habló sobre los desafíos que implica la activación del mismo, en un país, donde la abstención ha sido superior a la participación, tal y como ocurrió en las elecciones del pasado 21 de noviembre, en la cual el 58.2 % de los venezolanos dejó de participar.
El también abogado lista de primero estimular a la gente, seguido de la legitimización del grupo de ciudadanos que soliciten el referendo, así como su propia organización.
Destacó que, para no repetir los errores del referendo solicitado en 2016, cuando el Consejo Nacional Electoral (CNE), invalidó firmas por considerarlas inadecuadas o ilegales, han decidido plantear al Poder Electoral que la recolección de firmas sea igual a unos comicios, donde se habiliten los centros de votación y las máquinas capta huellas.
No obstante, aclara que para ello debe modificarse el reglamento que permita la activación del mecanismo revocatorio.
Otro de los aspectos que destaca Zaa, es que la petición del revocatorio debe hacerse en tiempo útil, como lo establece el artículo 72, donde se lee que todos los cargos y magistraturas de elección popular son revocables, transcurrida la mitad del período para el cual fue elegido el funcionario o funcionaria.
Zaa considera que la repetición de las regionales en Barinas, no es coincidencia. Sostiene que la intención era realizarlos un día ante de la fecha de activación de referendo revocatorio, el 10 de enero, cuando Maduro cumple la mitad de su mandato.
En tal sentido, no descarta que el proceso electoral de Barinas sea utilizado como pretexto por el CNE, para no atender la solicitud de referendo.
Por su parte, el Movimiento Venezolano por el Revocatorio (Mover), que desde hace meses inició la cruzada por el referendo revocatorio, ha manifestado que numéricamente sí se puede realizar, y que los obstáculos que enfrentan son políticos.
Nicmer Evans, politólogo y promotor del revocatorio, manifestó que el registro electoral es de 20.552.234 electores, de los cuales necesitan 205.523 (1%) para legitimar la consulta.
Agregó también que se requieren 4.110.447 firmas para activar el revocatorio, equivalente al 20% del padrón electoral. Mientras que para poder revocar el mandato, Evans explica que la opción del “sí” debe sacar un voto más que los 6.248.865 obtenidos en las cuestionadas elecciones de 2018.
Metas puesta en el segundo semestre del año
José Gregorio Zaa también dijo que si la petición de referendo avanza, ve posible que para el segundo semestre del año 2022, en Venezuela se esté ejecutando la consulta constitucional, y en caso de lograr el revocatorio, en un lapso de 30 días se debe estar escogiendo un nuevo presidente que culmine el actual periodo presidencial.
Antecedentes
La última vez que los venezolanos acudieron a las urnas electorales para revocar el mandato de un presidente, ocurrió en 2004, cuando Hugo Chávez Frías salió airoso al obtener 5.800.629 votos contra 3.989.008.
En el referendo del 2004, la oposición venezolana recaudó 3.200.000 firmas, de las cuales solo el CNE validó 1.900.000, mientras que el resto las solicitudes las consideró inválidas, suspendiendo de esa manera la convocatoria a revocatorio.
Pero una apelación de la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), permitió que se convalidaran 800.00 firmas, las cuales superaban los 2.700.000, es decir 300.000 firmas más de las solicitadas para ese entonces.
Sin embargo, al final, el ente rector solo aceptó 2.436.830, con lo cual se abrió paso al referendo, realizado un 15 de agosto del 2004.
Es una petición de los ciudadanos
A diferencia del revocatorio del 2004, y la solicitud de 2016 planteada desde la Asamblea Nacional de mayoría opositora. En esta oportunidad, la solicitud de referendo responde a la ciudadanía, y no a los partidos políticos, dijo Zaa.
Además manifestó que esta petición es liderada por los movimientos sociales, ONG, y la iglesia. Sin embargo, espera que con el pasar de los días, se sumen nuevas voluntades, que den mayor peso a la solicitud del revocatorio, incluyendo a la comunidad internacional.
Por Anderson Piña Pereira
Fotos: Ángel Zambrano, archivo El Informador Venezuela