La Araña, cueva del parque nacional Dinira, en el pueblo de Buenos Aires, parroquia Humocaro Alto del municipio Morán, Estado Lara, fue la tumba que los asesinos usaron para esconder el cadáver del ciudadano Ángel Luis Gil Peraza, a quien desaparecieron en la mañana del jueves primero de febrero, tras haberlo abordado en la carretera principal.
La Delegación Municipal El Tocuyo del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) inició la investigación en principio como “persona desaparecida”, aunque, al indagar sobre quién pudiera estar detrás de los hechos, sus “sabuesos” conocieron que, una semana antes, Gil Peraza había sido víctima de agresión y de amenazas de muerte por parte de alias »El Zamuro», quien no aceptaba que éste fuese la actual pareja de la mujer con la cual tuvo dos hijos.
La búsqueda de Gil Peraza mantuvo ocupados a los investigadores del Cicpc de El Tocuyo, así como también a bomberos de Inparques, policía estadal y la PNB hasta la tarde del sábado 17 de febrero, cuando lo encontraron en la cueva ya referida, en avanzado estado de descomposición.
Con la certeza y rigurosidad que los caracteriza y luego de las investigaciones de campo, los funcionarios del Cicpc detuvieron a Rubén Amado Principal Principal, de 27 años, en atención a orden de aprehensión librada el 23 de febrero por el Tribunal de Control N° 8 del Estado Lara.
La detención se llevó a cabo ese mismo día por la tarde, en la carrera 10 entre calles 10 y 11 del barrio Coromoto, en El Tocuyo.
Autor intelectual
En el contexto de las investigaciones supervisadas por el comisario general Pablo Castro, jefe de la Delegación Estadal Lara, el Cicpc mantuvo la búsqueda del otro involucrado y autor intelectual, Daniel Antonio Segovia, de 35 años, quien quedó requerido desde el 28 de febrero por el Tribunal Octavo de Control, según oficio 207.
Lo detuvieron en la mañana de este sábado 23 de marzo en el caserío Los Aposentos, inmediatamente después de procesar información según la cual usaba una identidad falsa para eludir a las autoridades.
Se identificaba con una copia de cédula de identidad, con el nombre de José Lucas Canelón Martínez, de 61 años, por lo que incurrió en falsa atestación.
En el curso de toda la investigación, el Cicpc colectó, entre varias evidencias, un celular, una moto Guasare G-20059 de color negro; la vestimenta de la víctima de homicidio, un mecate, una concha correspondiente a una munición marca Western 38, especial; un guante de fibra, una escardilla, varias prendas y otra moto Keeway TX200, de color gris, año 2014, placas A08D06A.
Al momento en que los funcionarios del Cicpc hallaron el cadáver de Ángel Luis, a 15 metros dentro de la cueva, las evidencias revelaron que había sido maniatado y amordazado.
¿Por qué lo asesinaron?
Los sabuesos determinaron que se trató de un crimen eminentemente pasional, para el cual, Daniel Antonio Segovia se hizo acompañar de su yerno, Rubén Amado Principal, quien le cortejaba a su hija mayor.
Fue así como la mañana del jueves 1° de febrero de este año, como antes se indicó, valiéndose de la fuerza física y superioridad numérica, así como de una arma de fuego, sometieron a Ángel Luis, a quien, habiéndolo golpeado sin piedad con un palo, le quitaron la vida, para finalmente ocultar el cadáver en la cueva La Araña, donde, pasados 17 días, fue hallado y removido por el Cicpc de El Tocuyo, organismo que esclareció el atroz crimen en cuestión de días.
Fuente: Cactus 24