Será este miércoles 27 de noviembre cuando se decida si el conocido periodista y ex gobernador del Estado Lara, Orlando Fernández Medina, es sometido, o no, a una intervención quirúrgica en torno a la afección de salud que actualmente presenta,
El propio Fernández Medina, vía telefónica y desde su propia casa de habitación, fue quien así lo expuso a este portal noticioso, en una conversación “sin tapujos”, como él siempre lo acostumbra hacer.
El también ex concejal, ex diputado regional, ex diputado nacional y ex senador de la república, confirmó en dicha conversación que, efectivamente, se le había diagnosticado un cáncer de colon, al tiempo que reveló que ya se le habían realizado diferentes exámenes médicos en otras áreas de su organismo, a los fines de que, precisamente, el facultativo que le atiende tome la decisión antes referida, por supuesto, en base a los resultados de dichos exámenes.
Hace unos tres meses
Fernández Medina, uno de los políticos más emblemáticos y combativos del Estado Lara, quiso destacar que este percance de salud comenzó a afectarle hace alrededor de tres meses, afección que se manifestó inicialmente con intensos dolores internos, una gastritis severa, diarrea, náuseas y malestar general, aparte de un derrame sanguíneo a nivel anal.
Explicó que, como consecuencia de todo ello, le sobrevino, además, una pérdida de 17 kilogramos de peso.
Afortunadamente –explicó–, gracias al tratamiento médico que se le aplicó, pudo él recuperarse bastante, lo que le permitió poder efectuarse otros nuevos exámenes que le fueron prescritos, y que, de alguno de estos exámenes, provino la detección médica, debidamente confirmada hace unos quince días, del cáncer en el colon.
–Ahora –dijo–, se me han hecho otros exámenes, que son los que van a permitir decidir si se me somete, o no, a una intervención quirúrgica, o si se me prescribe tratamiento con quimioterapia.
“Muy positivo…”
Valga destacar que, en nuestra conversación con Fernández Medina, percibimos en él mucha lucidez y claridad acerca de lo que habla.
Y, cuando le preguntamos acerca de su estado de ánimo, expresó:
–Mira: Yo me encuentro con un estado de ánimo muy positivo, y, sobre todo, con mucha fe en Dios, de que voy a salir avante de este percance de salud.
–Pero, además –agregó–, me he sentido muy reconfortado y agradecido por la inmensa solidaridad de que han hecho gala los larenses y los yaracuyanos en esta coyuntura de salud que se me ha presentado, cuestión que se demostró con dos detalles.
–En primer lugar, fue enorme la cantidad gente que acudió a donar sangre en la oportunidad en que nuestra familia lo solicitó, hace algunos días atrás, al extremo de que tuvimos que devolver a muchas personas que, generosamente, habían acudido a efectuar tal donación.
–Claro: Si finalmente me intervienen quirúrgicamente, es probable que vuelva a necesitar de donantes de sangre, pero, en todo caso, ya avisaremos al respecto.
–Y, en segundo lugar, sé que esta cadena de solidaridad se ha extendido a millares de personas, incluso en todo el país, que están elevando plegarias Dios por mi recuperación, cuestión que agradezco profundamente.
–Tengo ´plena conciencia –aseveró— de que el país y los venezolanos me necesitan, por lo que sigo firme en la batalla por la vida y por retornar a la brega a favor la reconquista de la democracia y de la libertad para nuestra patria,
Colaborador de EL INFORMADOR
Valga recordar que EL INFORMADOR es un medio de comunicación al que Fernández Medina ha estado bastante vinculado, tanto en lo personal como en lo profesional.
Y, en ese sentido, debemos recordar que, entre otras cosas, él fue nuestro corresponsal especial para reportar la lucha y posterior guerra civil que se libró en Nicaragua para salir de la tenebrosa satrapía de los Somoza, Anastasio padre, y Anastasio hijo, dictadura que se prolongó por espacio de tres décadas,
Por tal motivo, aparte de hacerle llegar un fuerte abrazo, le hacemos igualmente conocer nuestros deseos por su pronta recuperación e incorporación a sus actividades cotidianas, con el convencimiento de que es mucha la gente que todavía tiene en él puestas sus esperanzas y su fe.
¡Ánimo, Orlando…! ¡Estamos contigo…!
Gráfica: Cortesía Juan Carlos Giménez
RG