Real Madrid y Chelsea firmaron un discreto empate 1-1 el martes, en un choque de ida de las semifinales de la Liga de Campeones en que Karim Benzema salió al rescate del club español con un sensacional gol frente a un rival que fue superior.
Una bonita definición individual de Christian Pulisic puso en ventaja a Chelsea temprano en la visita a la capital española. El extremo se convirtió en el primer jugador estadounidense que anota en las semifinales del torneo.
Bajo una fuerte lluvia, el partido en el estadio Alfredo Di Stéfano fue el primero de la Champions luego del fiasco de la polémica Superliga.
El torneo, que hubiera asegurado cada año la participación fija del Madrid y Chelsea, fue abortado en un lapso de dos días. Chelsea, uno de los seis fundadores, fue uno de los primeros que renunció al proyecto, junto con los otros cinco clubes ingleses.
Los merengues no han desistido de hacer realidad la Superliga, pero minimizó la posibilidad de sería víctima de una vendeta de la UEFA en la Champions. No trascendieron polémicas arbitrales de escándalo en el partido el martes.
Chelsea fue una tromba en los primeros compases, con el pincelazo de Pulisic para abrir la cuenta, llevándose al arquero Thibaut Courtois con un regate.
Tras ese tanto a los 14 minutos, el conjunto londinense tuvo varias oportunidades de ampliar la ventaja.
Pero la definición de volea de Benzema dentro del área a los 29 niveló el marcador. Las ocasiones escasearon el resto del partido.
“Quizá pudimos haber definido el encuentro muy pronto, en el primer tiempo, que jugamos con mucha fuerza. En la segunda parte, todo fue más táctico”, explicó el técnico del Chelsea, Thomas Tuchel.
El compromiso de vuelta será el 5 de mayo en Londres.
“Vamos allí a ganar con la ambición de jugar arriba”, advirtió el zaguero madridista Raphael Varane.
La otra semifinal se pondrá en marcha el miércoles, con el Paris Saint-Germain de local ante el Manchester City. AP