Es una de las prendas más reconocibles de la historia del cine estadounidense, el vestido de cuadros azul y blanco que una joven Judy Garland lució como el personaje Dorothy en la película clásica de 1939 “The Wizard of Oz” (“El mago de Oz”).
Por décadas, se pensaba que una de las versiones del vestido que Garland usó en la película se había perdido en la Universidad Católica de América, donde había sido entregado a alguien en el departamento de teatro a comienzos de la década de 1970. El año pasado, al hacer limpieza en unas oficinas, se encontró el vestido en una vieja caja de zapatos, y ahora será subastado.
Cuando lo vio por primera vez “todo en lo que podía pensar era cuando vi la película cuando era niña y crecí con ella”, dijo Jacqueline Leary-Warsaw, decana de la escuela de música, teatro y arte en la universidad, ubicada en Washington. “De alguna manera era como si estuviera viendo mi infancia”.
Leary-Warsaw y otros esperan que esa nostalgia sea un factor que se tome en cuenta cuando el vestido sea rematado en la subasta “Classic Hollywood: Film and Television”, de artículos de Hollywood clásico, en la casa de subastas Bonhams el 24 de mayo en Los Angeles, donde tiene un precio estimado de salida de entre 800.000 a 1,2 millones de dólares. Bonhams exhibirá el vestido esta semana en su local de Nueva York antes de que sea enviado a California para ser exhibido y para su subasta.
Helen Hall, directora de cultura popular para Bonhams, dijo que el mercado para objetos de recuerdo, y vestuarios de cine en particular, es fuerte y “The Wizard of Oz” es una piedra angular en la cultura.
La gente “recuerda bastante la primera vez que vieron la película, el efecto que tuvo en sus vidas”, dijo. La película es famosa por su música, sus diálogos y sus aspectos visuales, especialmente cuando Dorothy va de una Kansas apagada y en colores sepia a la gloriosamente multicolor Oz.
Durante la filmación se confeccionó más de un vestido para Garland. Hall dijo que se sabe de cuatro vestidos y sólo dos, incluyendo el que se encontró en la Universidad Católica, tienen la blusa que usó debajo. Bonhams vendió el otro vestido con blusa en una subasta en 2015 por más de 1,5 millones de dólares.
También hay pares de las zapatillas rubí que usó Garland, un par forma parte de la colección en el museo Smithsonian.
El vestido recién redescubierto había sido originalmente regalado por la actriz Mercedes McCambridge al padre Gilbert Hartke, quien entonces era el director del departamento de teatro de la universidad, en 1973, dijo Leary-Warsaw, aunque no está claro cómo terminó en manos de McCambridge.
De alguna manera en los años siguientes el departamento perdió la pista del vestido hasta que se convirtió en algo que la gente pensaba que era “sólo un mito”, dijo Leary-Warsaw. El año pasado durante los preparativos para una remodelación, se abrió una bolsa donde estaba la caja de zapatos y ahí estaba el vestido, cómo llegó hasta ahí continúa siendo un misterio, agregó.
El vestido está en buen estado, fuera de un pedazo que había sido cortado. La blusa se encuentra un poco más frágil.
Al investigar el vestido se determinó que Garland lo usó en la escena en la que es confrontada en un castillo por la amenazadora Bruja del Oeste.
La escuela decidió subastarlo en vez de conservarlo y planea usar las ganancias de la subasta para crear un programa de cine completo en el departamento de teatro. AP