Desde tempranas horas de este jueves 27Abr, un grupo de docentes, obreros y administrativos se protestaron frente a la Inspectoría del Trabajo, en el centro de Barquisimeto.
Luis Arroyo, presidente del Colegio de Profesores del estado Lara, expresó que los docentes continuarán asamblea permanente a poco más de 100 días de iniciada la protesta del magisterio por sueldos dignos.
El Gobierno no ha respondido a los educadores y por tanto continuarán las acciones de calle hasta lograr la firma de la tercera convención colectiva y se les restituyan los beneficio “conculcados”, justificó.
Aunque se activó la cláusula 86 del segundo contrato colectivo que contempla el seguimiento al cumplimiento de esa convención, seguirán reclamando, porque el objetivo es rescatar el salario económico y el salario social que fueron sepultados por el Gobierno nacional, acusó.
En tal sentido, el líder sindical convocó a los todos los docentes y personal obrero, administrativo y colectividad en general a participar en la Gran Protesta, este 1 de mayo, Día Internacional del Trabajador. La concentración será en la plaza Los Ilustres de donde partirá la marcha, acotó.
Luego del paréntesis, reiteró que no cesarán en el reclamo de mejoras socioeconómicas y las clases están suspendidas. Hay profesores que se colocaron la “mano en el corazón” y acuden uno dos veces por semana.
La decisión es respetable y es una acción voluntaria no están obligados, dijo Arroyo.
En la misma línea, Hernán Sánchez, presidente del Sindicato de Trabajadores de la UCLA, manifestó su solidaridad y acompañamientos a los “valientes” educadores en la lucha.
Al final del día, los problemas que les afectan son similares y luchan por un mismo objetivo, recuperar la póliza de HCM y el seguro funerario, abolir el memorando 2792 y la eliminación del Instrumento Onapre.
Hernán Sánchez, presidente de Soucla. Sorelis Faneite, sindicato de obreros de la UPEL-IPB.
El sueldo de los obreros uclaístas es de 10 dólares mensuales. Igualmente del personal de la Unexpo y la UPEL, por eso el 1 de mayo no es día de celebración sino de protesta por las políticas antiobreras ejecutadas por el gobierno de Nicolás Maduro.
En efecto, el objetivo es el mismo, coincidió Sorelis Faneite, presidenta del Sindicato de Obreros de la UPEL-IPB, y por tanto han elevado la voz de protesta conjuntamente con el gremio docente.
Recordó que en 2021 fue homologada. Sin embargo, los trabajadores no perciben los beneficios económicos y sociales que les corresponden.
Al igual que el resto de los trabajadores de la administración pública perciben un salario “mísero”, que no cubre sus necesidades básicas, manifestó.
Finalmente, hizo un llamado a participar en la “Gran Protesta”, el 1 de mayo.