La ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024, celebrada este viernes 26 de julio, sigue generando intensas reacciones en la clase política francesa, por lo que muchos consideran “un acto de mofa a una escena bíblica”.
Mientras la izquierda la consideró un «orgullo» y una «bofetada a los oscurantistas», sectores de la derecha la calificaron de «vergüenza» y «wokista».
El momento más controvertido de la ceremonia fue la presencia de “drag queens” (actores con vestimenta y apariencia de transformistas. aun cuando no necesariamente lo sean) en una puesta en escena que evocaba la Última Cena de Jesucristo con sus apóstoles.
En esta representación, el cantante Philippe Katerine, pintado de azul y casi desnudo, adoptaba una postura similar a la de Dionisio, publicó “El Mundo”, de París,
Valérie Boyer, senadora de Los Republicanos (derecha), criticó la escena como «una visión de nuestra historia que busca ridiculizar a los cristianos».
Julien Odoul, portavoz de la Agrupación Nacional (RN), la describió como «una vergüenza» y «un ataque a la cultura francesa».
La eurodiputada Marion Maréchal, por su parte, llamó al evento «J-Woke 2024», y lo calificó como una provocación de una «minoría de izquierda».
También el clero
La conferencia episcopal de Francia también expresó su desaprobación, lamentando profundamente las escenas de «mofa del cristianismo».
Sin embargo, también reconocieron que hubo «momentos maravillosos de belleza y alegría, ricos en emociones y universalmente reconocidos».
Los obispos franceses manifestaron su solidaridad con los cristianos de todo el mundo que pudieron sentirse heridos por “la provocación”.
Igualmente Aya Nakamura
Otro momento polémico de la jornada inaugural fue la actuación de Aya Nakamura, famosa cantante francesa de origen maliense, criticada recientemente por la derecha.
Vestida con plumas doradas, actuó junto a la solemne Guardia Republicana.
Marine Le Pen, líder del RN, había considerado meses atrás que la presencia de Nakamura en el evento era un intento del presidente Emmanuel Macron de «humillar al pueblo francés».
Aunque no comentó la ceremonia, este sábado expresó su apoyo a los deportistas franceses, deseándoles «buena suerte» para «dejar en alto los colores de Francia y hacer sentir orgulloso al pueblo francés», publicó también “El Mundo”.
Fuente: Versión Final
Gráfica: Referencial
RG