El presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu está a la orden de dimitir como máxima autoridad del Barcelona si el astro argentino Lionel Messi cambia de opinión de abandonar el club blaugrana de manera pública para continuar en el Camp Nou.
Bartomeu podría abandonar su cargo pero no convocaría elecciones de manera inmediata, ya que su idea es que el resto de la junta directiva continúe.
La postura del Barcelona se mantiene inalterable y no se plantean negociar la venta del argentino por lo que el Manchester City o cualquier otro club interesado en su fichaje deberán pagar los 700 millones de su cláusula de rescisión para conseguir sacarle del Barça.
El martes Messi envió un burofax al Barcelona para comunicar su intención de abandonar el conjunto Culé tras una decepcionante temporada sin títulos, que culminó con la derrota por 8-2 ante el Bayern de Múnich en los cuartos de final de la Champions League.
El rosarino pretende acogerse a una cláusula de su contrato que le permitía rescindirlo. Sin embargo, el club entiende que esa cláusula ya expiró el 10 de junio por lo que asegura que Messi tiene otra temporada más de contrato en vigor y que su cláusula de rescisión se mantiene en 700 millones.
El Manchester City está siguiendo paso a paso cada movimiento. La idea del club inglés es ficharlo gratis pero el club inglés contemplaría la posibilidad de ofrecer una cifra de entre 100 y 150 millones de euros si el argentino finalmente no puede desligarse del Barcelona de manera unilateral.
Messi, que en junio cumplirá 34 años, quiere irse del Barcelona para seguir ganando títulos y una de sus principales razones es la gestión de Bartomeu.
El presidente, por eso, ha tomado la decisión de dimitir si eso ayuda a la continuidad del argentino pero está por ver si ya es demasiado tarde.
Daniel Sosa con información de ESPN y TV3
Foto: AFP