«Soy Isabel, abrime», se escuchó del otro lado de una puerta. Y Maximiliano Villarreal, de 28 años de edad, que justamente era la pareja de la mujer que recién llegaba, abrió.
El hombre, que estaba en una celebración en casa de un amigo, recibió en ese momento una puñalada mortal que acabó con su vida. Faltaban minutos para la medianoche y en una casa en la localidad bonaerense de Dolores, en Buenos Aires ocurrió la tragedia, reseñó El Clarín.
La mujer le dio una puñalada mortal en el pecho al padre de sus dos hijas de 8 y 6 años, que trabajaba como albañil. Poco después la detuvieron.
La secuencia de los hechos fue confirmada a Clarín por fuentes de la investigación y la acusada por el delito de “homicidio agravado por el vínculo” fue identificada como Mónica Isabel González (25).
Mónica Isabel usó un cuchillo tipo verijero de 10,5 centímetros de largo. Uno de los testigos directos de cómo fue apuñalado a Maximiliano se lo arrebató de las manos a Isabel, que lo seguía blandiendo, describieron las fuentes al diario local.
Desde una casa vecina, salieron a ver lo que pasaba ante el griterío, una de esas personas que se asomó era justamente el hermano de la acusada, que estaba como invitado junto a su novio.
Fue él quien junto a Isabel cargaron a Maximiliano, ensangrentado y desvanecido, en el Renault Clío negro de la víctima y lo llevaron hasta el hospital local.
Los médicos no pudieron hacer nada para salvarle la vida. Y a Isabel la Policía se la llevó detenida mientras lloraba desconsoladamente.
En 2013, en 2018 y dos veces el año pasado, los dos se habían denunciado mutuamente por daños, pero quedaron archivadas las denuncias, detallaron.
Hubo versiones que indicaron que la detenida le reclamaba la cuota alimentaria, incluso también una supuesta infidelidad de parte de la víctima, pero hasta ahora nada de eso fue confirmado por las fuentes.
Aunque, para la Justicia no pasó inadvertido que mientras Maximiliano estaba en la casa de su amigo, su cuñado llegó a la propiedad vecina junto a su pareja y vio que el vehículo de la víctima estacionado en esa cuadra.
Incluso, la amiga de Maximiliano, que fue a festejar la mudanza de su hermana y su cuñado, le habría reprochado al hermano de la detenida que le hubiera avisado a Isabel dónde estaba su pareja.
“Le dijo algo así como: ‘Mirá lo que ganaron’”, describieron las fuentes sin dejar de mencionar que en un pasado esa joven y Maximiliano habían tenido una relación fugaz.
Por todo esto, en un principio, la fiscal de la UFI N°1 de Dolores, Verónica Raggio, demoró al hermano de la detenida y a su pareja para investigar si habían sido partícipes del crimen. Aunque luego, desestimó la aprehensión de ambos y les tomó declaración como testigos.
Según las fuentes, la detenida no presentaba lesiones y aún averiguan cómo llegó desde su casa a la propiedad de Miguel, ya que vive en la otra punta del barrio.
Con información de El Clarín