Al menos 12 personas fallecieron tras un ataque la noche de este martes 26 de octubre, atribuido al grupo yihadista Estado Islámico (EI), perpetrado en la población de Miqdadiyah, al noreste de Bagdad, en Irak.
En el suceso una veintena de personas resultaron heridas. El primer ministro iraquí, Mustafá al Kazemi, dijo que no quedará impune.
Por su parte, el comandante de la Policía de Diyala, Ihsan al Rebeghi, dijo que se han impuesto “medidas estrictas de seguridad en la cercanía del pueblo de Al Rashad y las aldeas vecinas y no se permite el movimiento a menos que sea necesario”.
El ataque tuvo lugar anoche en la población de Miqdadiyah, situada en la provincia de Diyala y a tan solo 80 kilómetros al noreste de Bagdad, y las autoridades acusan al EI de llevarlo a cabo, aunque la organización extremista ni ningún otro grupo han reivindicado su autoría.