El canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Jorge Arreaza, informó este domingo sobre la creación de una Oficina de Representación de Intereses Oficiales con el gobierno de Estados Unidos (EEUU), dirigida a atender cualquier tipo de trámites migratorios y temas de interés bilateral entre ambas naciones.
En la fecha cuando vencía el plazo para el retiro del personal diplomático de EEUU de la embajada en Caracas, tras el anuncio de ruptura de las relaciones binacionales, se informa sobre la creación de esta instancia que, según el titular de exteriores, ha sido iniciativa de EEUU.
«Por petición de Estados Unidos, conversamos varias veces y alcanzamos este preacuerdo que de no funcionar en el lapso de treinta días que se da, derivará en que los funcionarios que están en Caracas y en Washington, deberán retirarse; y la ruptura será total por lo que designaremos algún tercero, país o Estado para llevar los trámites migratorios consulares», explicó durante una entrevista concedida a Russia Today (RT).
Agregó que estas decisiones se han venido conversando como medida para mantener el cuidado de los intereses fundamentales de ambas naciones, por lo cual, se han sostenido conversaciones con el encargado de Negocios estadounidense en Caracas y con funcionarios del Departamento de Estado de EEUU.
Señaló que estas acciones, enmarcadas en la ruptura de las relaciones diplomáticas y políticas con el gobierno norteamericano, responsable de dirigir una operación golpista en Venezuela, no representan en absoluto un paso atrás para la nación suramericana que siempre ha estado dispuesta a dialogar con EEUU, y la creación de esta oficina obedece a lo establecido en el Derecho Internacional.
«Estados Unidos y Venezuela, hemos alcanzado este preacuerdo que ojalá pueda derivar en las oficinas de interés en ambas capitales», reiteró.
Cabe recordar que el 25 de enero con una caravana de 10 vehículos para el traslado del personal diplomático de esta embajada al Aeropuerto Internacional de Maiquetía Simón Bolívar, quedándose solamente el “personal indispensable”, según instrucciones del secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo.