El jefe del Mosad, los servicios de inteligencia israelíes, se reunió en Catar con el director de la CIA, Bill Burns, y el primer ministro catarí para discutir un nuevo proyecto de acuerdo relacionado con la liberación de rehenes en Gaza. Este anuncio fue realizado por la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien indicó que las negociaciones continuarán en los próximos días entre los mediadores y Hamás.
El presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi, también ha propuesto un alto el fuego de dos días, durante el cual se intercambiarían cuatro rehenes por algunos prisioneros en Israel. Esta tregua sería un paso previo a negociaciones más amplias para un cese al fuego completo y la entrada de ayuda humanitaria en Gaza, un territorio que Israel controla estrictamente.
Sin embargo, Netanyahu afirmó que Israel no ha recibido ninguna propuesta formal sobre la liberación de rehenes a cambio de una tregua de dos días. Su portavoz, Omer Dostri, aseguró que si tal propuesta hubiera sido presentada, el primer ministro la habría aceptado de inmediato.
En medio de estas tensiones, el parlamento israelí aprobó un proyecto de ley que prohíbe las actividades de la UNRWA, la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, a pesar de las objeciones de Estados Unidos y la ONU. Israel ha acusado a algunos empleados de la UNRWA de estar involucrados en el ataque de Hamás del 7 de octubre, lo que ha llevado a la agencia a calificar el voto como «escandaloso» y perjudicial para las operaciones humanitarias en Gaza.