El Ministerio de Relaciones Exteriores denunció el lunes 28Abr, que las autoridades estadounidenses separaron a una niña de dos años de su madre cuando esta fue embarcada en un vuelo de repatriación hacia Venezuela, lo que ha supuesto que la menor haya quedado retenida en suelo estadounidense.
En ese sentido, el canciller Yván Gil, acusó a Estados Unidos de contravenir «las normas internacionales y muy especialmente la Declaración Universal de los Derechos de los Niños y de la Carta de la Naciones Unidas» al sustraer a una menor de su familia.
En un comunicado difundido en sus redes sociales, exigió que la pequeña sea devuelta al país latinoamericano de forma «inmediata» y afirmó que recurrirá a todos los mecanismos posibles para respetar «la sagrada integridad» de las familias.
«Venezuela denuncia ante el mundo el secuestro por parte de autoridades estadounidenses de la niña venezolana Maikelys Antonella Espinoza Bernal, de dos años de edad, quien fue separada de su madre en el momento en que ella iniciaba un vuelo de repatriación», dice el texto que acompaña a un comunicado oficial.
Por su parte, el presidente, Nicolás Maduro, afirmó que las movilizaciones organizadas en el país por el 1 de mayo estarán centradas en pedir la libertad de la menor.
«La gran marcha del primero de mayo será una gran marcha por la libertad de la niña secuestrada y por la libertad de todos los secuestrados en El Salvador», manifestó.
El padre de la pequeña había sido también expulsado de Estados Unidos y enviado a una de las cárceles de El Salvador, según informaron las autoridades venezolanas, que cifraron en más de 250 casos de ciudadanos venezolanos recluidos en prisiones salvadoreñas.
En este sentido, el comunicado tilda al presidente de El Salvador, Nayib Bukele, de «sátrapa» y compara su política de encarcelamiento con los campos de exterminio de la Alemania nazi.
«En esa práctica deleznable, y frente a la mirada indignada de las mujeres y hombres de bien del mundo entero, se somete a seres humanos a tratos indignos y crueles, se separa a las familias y se envía a ciudadanos venezolanos a campos de concentración en terceros países de gobiernos cómplices y lacayos», reza la nota. S
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