En la América Latina y el Caribe hay en este momento, o habrá para el año 2030, 1.700 millones de personas afectadas de algún tipo de cáncer, de acuerdo con las estadísticas ofrecidas por la propia Organización Mundial de la Salud (OMS), personas que estarán padeciendo del dolor que tal enfermedad ocasiona.
Así lo manifestó el médico Argimiro Colmenárez, especialista en la materia, quien habló sobre el tema en el desarrollo de las XXX Jornadas Médicas de la Clínica “Santa Cruz”, de Barquisimeto, actividad que se desarrolló en la sede del Colegio de Médicos del Estado Lara.
-Pero, lamentablemente, en Venezuela hemos retrocedido al menos entre 30 y 50 año en cuanto a políticas de previsión contra el cáncer, por la sencilla razón de que las políticas oficiales en los últimos años se han ido deteriorando al extremo de que ya hay muchas deficiencias tecnológicas de prevención, aparte de que la misma gente ya no puede costearse algún tipo de tratamiento preventivo, por lo costoso del mismo.
Se refirió luego al dolor que provoca la enfermedad, y dijo que de la cantidad de afectados antes indicada, el 70 por ciento de ellos sufrirá de algún tipo de dolor; luego habrá un 45 por ciento con dolor después un 20 por ciento y luego un 25 por ciento que no sufrirá dolor al principio de la enfermedad.
Para prevenir el dolor –apuntó-, el enfermo debe recibir un tratamiento que incluya un analgésico multimodal, es decir, que implique recibir tratamiento con medicamentos variados, de manera que, con ellos, se pueda combatir el dolor de manera más efectiva.
Con tratamientos o medicamentos tan costosos ¿cómo puede el venezolano de a pie obtener un tratamiento, bien sea contra el dolor o contra el cáncer mismo? se le consultó al especialista
-Hasta el año 2016, en BADAN-Lara, teníamos existencia de algunos medicamentos tanto para el dolor como para el cáncer mismo, incluso muchos de esos medicamentos por donaciones provenientes de otros países, pero ya se agotaron, según tengo entendido.
¿Qué está planteado entonces?
Pues que las autoridades de Salud en Venezuela asuman su responsabilidad y procedan a dotar a los centros oncológicos, como debe ser, de los medicamentos y de los tratamientos adecuados para ello, y que sea verdaderamente gratuitos, porque tanto los medicamentos como el tratamiento, cualquiera sea, son demasiado costosos para el venezolano de a pie.
Reinaldo Gómez
Foto: Daniel Sosa