(AP).- Un poeta ruso fue condenado el jueves a siete años de cárcel por recitar versos contra la guerra de Rusia en Ucrania, un duro castigo que coincide con la implacable represión del Kremlin contra la disidencia.
La Corte de Distrito Tverskoi de Moscú condenó a Artyom Kamardin por hacer llamados que socavan la seguridad nacional e incitar al odio en relación con la lectura de sus poemas contra la guerra durante una actuación callejera en el centro de la capital rusa en septiembre de 2022.
Yegor Shtovba, que participó en el acto y recitó versos de Kamardin, fue condenado a cinco años y medio por los mismos cargos.
El encuentro junto al monumento al poeta Vladimir Mayakovsky se celebró días después de que el presidente del país, Vladímir Putin, ordenó la movilización de 300.000 reservistas ante los reveses militares de Moscú en Ucrania. La medida, ampliamente impopular, llevó a cientos de miles a huir del país para evitar ser reclutados por el ejército.
La policía dispersó rápidamente la concentración y poco después detuvo a Kamardin y a varios participantes más.
Los medios rusos citaron a amigos de Kamardin y a su abogado para denunciar que la policía lo golpeó y violó durante la detención. Poco después, apareció, con la cara amoratada, disculpándose por sus acciones en un video policial difundido por los medios partidarios del Kremlin.
Las autoridades no han tomado medidas para investigar los supuestos abusos policiales.
Durante la vista del jueves, la esposa de Kamardin, Alexandra Popova, fue escoltada fuera de la sala por los guardas luego de que gritó “Vergüenza” tras conocerse el veredicto. Popova, quien habló con reporteros tras la vista, y varias personas más fueron detenidas después acusadas de celebrar una “concentración” no autorizada en el exterior del tribunal.
Entre finales de febrero de 2022 y principios de este mes, 19.847 personas han sido detenidas en Rusia por protestar o pronunciarse en contra de la guerra, y otras 794 se han visto implicadas en casos penales por su postura contraria a la guerra, según el grupo de derechos OVD-Info, que rastrea las detenciones políticas y proporciona asistencia jurídica.
La represión se ha llevado a cabo bajo el amparo de una ley adoptada por Moscú días después de enviar sus tropas a Ucrania, que criminaliza de facto cualquier expresión pública sobre la guerra que se desvíe de la narrativa oficial.