La lanzadora mirandina, Ahymara Espinoza acude a entrenar en un campo de béisbol de su natal San José Barlovento, siempre con su norte entre ceja y ceja y sin desanimo a pesar de no contar con el apoyo requerido para cumplir sus entrenamientos.
Sin contar con un entrenador, Espinoza se esfuerza por mantenerse saludable y mejorar su técnica para el impulso de bala, prueba del atletismo que práctica desde los 11 años de edad cuando pasaba por la categoría infantil.
Los retos han sido muchos desde entonces, pero lo vivido entre 2020 y 2021 ha sido lo más duro de su toda su carrera deportiva y más aún cuando tiene un nombre ganado en el concierto internacional.
Lo más difícil del último año fue no perder el ánimo en momentos que era abrumada por múltiples obstáculos que le impidieron participar en torneos internacionales, por la crisis venezolana y la pandemia de coronavirus.
Recién este miércoles 30 de junio el Comité Olímpico Venezolano confirmó en su cuenta de Twitter que Espinoza se clasificó a los Juegos Olímpicos en virtud de su ránking. Será su segunda participación olímpico, ya que también estuvo en Río de Janeiro 2016 y es la clasificada 43 por Venezuela a la magna cita del deporte.
La suspensión de muchos torneos por un lado y la falta de fondos por el otro, la obligaron en septiembre pasado a interrumpir su preparación en Eslovenia. Al volver a Venezuela, no recibió apoyo alguno para continuar su preparación, por lo que se vio forzada a entrenar por cuenta propia sin desmayar en el intento.
Durante los últimos nueve meses, la morena de 36 años ha entrenado en solitario y demuestra una vez más el tamaño de su orgullo y el amor por la disciplina y el país, mirando siempre con firmeza el anhelo de llegar a la final en la cita olímpica.
El atletismo estará presente en Tokio con Yulimar Rojas en el salto triple, Robeilys Peinado en el salto con pértiga, la barquisimetana Rosa Rodríguez en el lanzamiento de martillo y ahora la mirandina en la bala. /JU
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