Después de constantes quejas por parte de familiares de fallecidos, las ‘cavas’ refrigerantes de la morgue del Hospital Antonio María Pineda están en reparación, tras presuntamente dañarse hace unos 20 días.
Indicaron fuentes internas que las neveras habían recibido mantenimiento por última vez en el mes de marzo del presente año, cuando la comisión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) visitó la ciudad.
Hace unas semanas comenzaron a tener problemas algunas de ellas y los olores en la zona de la morgue eran el reflejo de ello, trabajadores limpiaban constantemente con agua y gasolina para combatir los gusanos.
Dentro de los ‘charcos’ de agua que se concentraban en las afueras de la morgue se observaban la cantidad de gusanos, que aparentemente se reproducían con más rapidez debido a la falta de refrigeración, aseguraron personas que decidieron no revelar sus nombres por temor a represalias.
Contaron que durante los días que han estado dañadas, ingresó una señora a la morgue a la 1 de la tarde y dos horas después ya tenía “queresas” (huevos de moscas), los familiares aparentemente emitieron quejas por no poder vestirla con facilidad durante la preparación del cadáver.
Señaló una fuente que los cadáveres pueden durar hasta una semana con la respectiva refrigeración normal, sin embargo, en el estado actual, no pueden permanecer ni 24 horas.
Enmanuel De Sousa
Fotos: Ángel Zambrano