La presidenta interina de Bolivia declaró el lunes personas no gratas a la embajadora de México, la encargada de Negocios de España y el cónsul español y les dio 72 horas para abandonar el país, tras un incidente en el que encapuchados españoles llegaron a la embajada mexicana en La Paz.
“Se ha cometido un grave atentado a la soberanía y la democracia de Bolivia, que deben ser respetadas”, dijo la mandataria interina Jeanine Áñez en una declaración de prensa.
Áñez ha especificado que «la conducta hostil, intentando ingresar de forma subrepticia y clandestina a la residencia de México en Bolivia, desafiando a los oficiales policiales bolivianos y a los propios ciudadanos, son hechos que no podemos dejar pasar».
Por su parte, La Secretaría de Relaciones Exteriores mexicana instruyó a la embajadora de México en Bolivia, María Teresa Mercado,para regresar a su país, con el fin de resguardar su seguridad e integridad tras la expulsión.
La Embajada de México en Bolivia quedará a cargo de Ana Luisa Vallejo, actual jefa de Cancillería de la Misión, según informó el Gobierno mexicano en un comunicado.