Anderson Piña Pereira.- A tan solo casi tres meses de la reconversión monetaria, aún hay muchas dudas e inquietudes sobre los anuncios económicos decretados por el presidente Nicolás Maduro. Los cuales hasta la fecha en vez de generar tranquilidad, lo que han generados desesperación.
Ese es el caso de Glorimar Vargas, ama de casa, quien al ser consultada indicó que luego de la reconversión y la regulación de precios, “ocurrió lo que todos imaginábamos: la desaparición de los productos de primera necesidad”.
Ese testimonio de Vargas coincide con un trabajo periodístico realizado por EL INFORMADOR, donde se pudo constatar que los productos proteicos sí están en el mercado y se consigue a precios “bajo cuerda” o “por debajo de la mesa”.
Durante un recorrido por una pollera, venta de huevos y carnicería se pudo apreciar los anaqueles vacíos, pero al preguntar por cualquiera de esto productos, la repuesta era: “A precio regulado no hay”.
Emiro Castillo quien es pensionado, al ser entrevistado respondió que la carne, el pollo y el huevo se consiguen, pero a precios excesivos, lo que hay es que tener plata.
Tras consultar los precios actuales en una pollera al este de la ciudad, se pudo apreciar que el kilo de pollo se vendía en Bs. S 750, muslo en Bs. S 930, pechuga Bs. S 900, alitas Bs. S 870, milanesa Bs. S 1200.
Mismo caso ocurría con el cartón de huevo, el cual se vendía completo y en 750 bolívares soberanos.
“Aquí solo sobreviven los que pueden”, agregó el comerciante Adalberto Romero, quien añadió que “un cartón de huevo equivale al 90 % de una quincena, si yo no me rebuscara, mis hijos no comerían nada”.
Marianela Reyes, administradora de profesión, se preguntó: “¿Para qué aplicaron medidas económicas, si esto sigue peor?. Además, prosiguió, diciendo que los pocos productos que se consiguen los venden bachaqueado y nadie hace nada al respecto.
La carne de res tampoco escapa de la realidad, y es que un recorrido por algunas carnicería la respuesta o el aviso es: “Carne no hay”, sin embargo, la poca carne que llega a los frigoríficos se vende bajo previo acuerdos.
“La última vez que compre carne, me la vendieron en 550 bolívares el medio kilo, mientras el kilo estaba en Bs. S 1100.