Saúl “Canelo” Álvarez le quitó el invicto a Callum Smith, al imponerse el sábado por decisión unánime, para apoderarse de los títulos de la AMB y el CMB en la categoría de los supermedianos.
El mexicano Álvarez (54-1-2 con 36 nocauts) dominó ampliamente el único combate que pudo sostener en el año de la pandemia. A lo largo de los 12 asaltos en el Alamodome, recurrió con frecuencia a golpes rectos y ganchos de derecha sobre la cabeza del púgil inglés.
“Es uno de mis memores triunfos, sin duda”, destacó Álvarez en el cuadrilátero, una vez que se embolsó el triunfo.
Dos jueces dictaminaron 119-109, y el tercero dio 117-111, todos en favor del “Canelo”.
Álvarez había noqueado a Liam, hermano mayor de Callum, el 1 de septiembre de 2016, en el AT&T Stadium de Arlington, también en Texas. Muchos especularon que Callum quería vengar aquel revés de su hermano en el noveno episodio.
Pero Álvarez no pasó grandes apuros ante el hermano menor.
Los dos púgiles sostuvieron su primera contienda de 2020, un año de escasa actividad boxística por el coronavirus. Y en los primeros cinco asaltos, ambos se mostraron algo oxidados.
Pasó casi un minuto de combate para que se asestara el primer golpe, un derechazo de Álvarez. Hubo pocos puñetazos e intercambios en el asalto inicial, en el que prácticamente se hizo boxeo de sombra.
Hacia el final de un sexto capítulo que tampoco había deparado emociones, Álvarez asestó un potente uppercut de derecha que hizo retroceder la cabeza de Smith. El mexicano buscó infligir más castigo al mentón, pero Smith sobrevivió.
El pelirrojo de Guadalajara dio otro duro derechazo al maxilar de Smith cuando faltaba alrededor de un minuto del octavo round. Y con minuto y medio por pelear en el noveno, Smith fue contra las cuerdas, tras absorber un tremendo gancho de derecha.
El castigo arriba continuó en los últimos episodios, lo que dejó enrojecido el rostro de Smith
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