El privado de libertad, Álvaro Wilfredo Villamizar, murió en la Comunidad Penitenciaria Fénix, después de haber sido trasladado siete días atrás desde el Hospital Central de Barquisimeto porque estaba muy grave de un dolor en el abdomen.
La ONG Una Ventana a la Libertad, indicó en una nota de prensa, que la madre del recluso recibió la noticia el domingo 17 de enero cuando cruzaba la revisión de seguridad para ingresar al penal.
“No, no, no. Se murió mi muchacho. Dios mío no”, gritó.
Según reporte que dieron funcionarios de Fénix a UVL, Álvaro Wilfredo fue llevado de manera inmediata hasta el área de enfermería del mismo penal, debido a que presentaba dificultad para respirar.
Supuestamente, cuando el privado de libertad fue ingresado para atención medica murió, cerca de las 11 de la mañana.
De acuerdo con lo reseñado por UVL, el hombre padecía de tuberculosis, y el pasado 10 de enero fue trasladado hasta la emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda desde la cárcel, porque presentó fuertes dolores abdominales que no pudieron ser atendidos en la enfermería del penal.
A la madre de Álvaro, le avisaron que el cuerpo ya había sido trasladado a la morgue del hospital central y debía ir allá para realizar los trámites legales y así poderle dar cristiana sepultura.
Villamizar estaba condenado a 26 años y 3 meses de prisión por su responsabilidad en el secuestro de un comerciante y un adolescente, ocurrido el 03 de abril de 2013, en el sector Macuto de Barquisimeto, estado Lara.
En octubre de 2013, junto a Wenyer Parra Arias (33), fue acusado de los delitos secuestro breve, robo agravado de vehículo automotor, lesiones intencionales leves y asociación para delinquir.
Villamizar estuvo privado de libertad en el Internado Judicial de Yaracuy conocido como “La Cuarta” y en el Centro Penitenciario David Viloria, mejor conocido como Uribana hasta que en diciembre de 2018 fue llevado a Fénix.
ED con información de Una Ventana a la Libertad