ICOLT / El presidente Nicolás Maduro anunció que su Gobierno dispondrá de 1.000 millones de dólares, provenientes de un “fondo especial”, para elevar la producción petrolera, que de acuerdo a cifras de la OPEP, sigue registrando caída.
Así lo dijo en rueda de prensa con medios nacionales e internacionales realizada este 12 de diciembre en el Palacio de Miraflores, donde acotó que en línea con esa intención, se han destinado 5 mil millones de dólares para “adecuar las instalaciones petroleras y dar un salto en la producción global” del país y elevar la producción de Rusia en los campos petroleros venezolanos a 1 millón de barriles diarios el próximo año.
En tal sentido, Maduro señaló que en 2019 se va a desarrollar un plan para “adecuar la inversión extranjera, la china, la rusa, la estadounidense, la nacional”.
Tal aseveración se contrapone con las de analistas como Asdrúbal Oliveros, presidente de Econoanalítica, para quien el gobierno puede verse en una situación de “impagos frente a países aliados” como China o Rusia.
Tras sus encuentros con los mandatarios de ambas naciones, en 2018, Maduro divulgó que alcanzó acuerdos por el orden de los cinco mil millones de dólares, con cada uno, para aumentar los envíos a ambos países.
¿Bajó o subió?
En su informe mensual de diciembre, la OPEP reseña que continúa el descenso del bombeo petrolero de Venezuela, toda vez que la caída de noviembre, estimada en 4,37%, fue más pronunciada que la de septiembre, de 3,3%.
Así, la producción se ubica en 1,137 millones de barriles diarios (mbd), aún cuando Caracas, en cambio, asegura que su oferta tuvo una leve recuperación, subiendo de 1,43 a 1,46 mbd. No obstante, reconoce que su producción está en los niveles más bajos de las últimas tres décadas.
Las eventuales inversiones de China y Rusia, así como la medida de la OPEP DE recortar el bombeo de 1,2 millones de barriles diarios a fin de promover un alza en los precios del petróleo, plantean retos a la industria petrolera venezolana, que ha regresado a cifras de los años 50.