Desde hace casi tres años, la familia Gómez-Mendoza, que vive en la calle 47 entre las carreras 12 y 13 de Barquisimeto, ha estado atravesando un calvario en lo que se relaciona con el servicio de gas.
-Es que lo que a nosotros nos ha ocurrido en estos últimos tres años con el servicio de gas doméstico –asevera la señora Rosario Mendoza de Gómez- yo creo que está muy por encima del padecimiento que, desde hace unos años para acá, viene sufriendo la inmensa mayoría de los barquisimetanos por la falta de gas.
-Ciertamente –recalca luego-, con el resto de los barquisimetanos, nosotros tenemos en común el hecho de que, ahora, el gas nos llega es cada dos, tres, cuatro, cinco y hasta seis meses.
-Pero es que Gas Lara parece haberse ensañado contra nosotros.
El caso
Y a continuación, la señora Mendoza de Gómez pasa a narrar, resumidamente, su historia, como usuaria del Gas Lara que es.
-En noviembre del año 2019, en uno de esos ya no muy frecuentes asignaciones de bombonas, resulta que el camionero –o los camioneros- nos cambiaron las dos bombonas, que, en nuestro caso, son de 18 kilogramos.
-Obviamente, en su momento, nosotros no nos dimos cuenta de ese cambio a bombonas de otras marcas, o de otras empresas comerciales, de la que fuimos objeto.
-Lo cierto es que vinimos a darnos cuenta de tal cambio cuando, unos dos meses después, llegó el momento de un nuevo cambio, o de una nueva sustitución de bombonas, y el camionero de ese momento fue quien se dio cuenta del cambio.
-De una vez, ese mismo camionero –otro distinto, por cierto- nos manifestó que no podía dejarnos sus bombonas porque las que se iba a llevar eran de otras marcas distintas a las que utiliza Gas Lara.
-Por supuesto, esto nos ha venido causando problemas persistentes, ya que durante algunos meses, no se nos asignaron las debidas bombonas por ese mismo motivo, a pesar de que las habíamos pagado.
-Lo cierto es que, después de tanto movernos por aquí y por allá, logramos entonces que los camioneros se llevaran esas bombonas cambiadas, pero no para –a su vez- cambiárnoslas por las nuestras originales, sino para llenárnoslas, y así lo hicieron.
-Desde entonces, es de esa forma como hemos podido recibir nuestra asignación de gas doméstico, por supuesto, cuando éste llega a nuestra comunidad.
Otro problema
-Pero ahora se nos está presentando otro problema serio, que se agrega al que ya tenemos, y es que resulta que, en la última entrega que recibimos –por supuesto, con las mismas bombonas que ya nos cambiaron-, ocurrió que una de tales bombonas trajo su válvula despegada parcialmente del cuerpo del cilindro, y por allí se bota el gas.
-Por cierto, quien le causó tal daño a dicha bombona se cuidó, de todas maneras, de pegarla-o al menos de tratar de pegarla-, con un material pastoso.
-No obstante, el daño era visible, y, mientras tanto, la otra bombona tenía torcido el pequeño volante de su válvula, lo que le origina dificultades para el abrir y el cerrar de la misma.
-Quiero destacar que, durante todos estos años, desde el mismo inicio del primer problema, hemos hecho cualquier cantidad de gestiones para ver si Gas Lara nos soluciona esta enojosa situación.
-Incluso, ya perdimos la cuenta de las veces que hemos visitado y entregado cartas a las oficinas de este último despacho, en donde, si bien es cierto prestan una buena atención al público, no es menos cierto que pareciera que lo mejor que saben hacer es no solucionar ningún problema a los usuarios.
-Huelga manifestar que las respuestas a nuestras misivas han brillado por su ausencia.
Correspondencia frustrada
-Lo último que hicimos fue enviar, hace alrededor de un mes, otra correspondencia al señor presidente de Gas Lara, contentiva de los anteriores planteamientos.
-La empleada que nos recibió dicha correspondencia nos manifestó que nos llamarían telefónicamente para la debida respuesta, en un lapso de entre ocho y quince días.
-Bueno, todavía estamos esperando que nos llamen.
-Tenemos en nuestro poder todos los documentos que no solamente nos acreditan como usuarios de Gas Lara, sino de todas las innumerables diligencias que hemos hecho en busca de solución a esta tragedia hogareña que estamos viviendo.
-Entonces, nuestro llamado es al presidente de Gas Lara, a los diputados al Consejo Legislativo del Estado Lara y al mismo gobernador de esta entidad federal, para que nos solucionen esta serie de problemas, y así acabar con este viacrucis que estamos viviendo con el servicio de gas doméstico desde hace ya casi tres años, como antes lo indiqué.
Reinaldo Gómez
Foto: Cortesía R. G.