La tensista australiana Ash Barty, primera cabeza de serie y N° 1 del ranking mundial de la WTA, este viernes dio un paso más hacia su primer título en canchas de arcilla desde que conquistó el Abierto de Francia de 2019, al aventajar en cuartos de final 2-6, 6-1, 7-5 a la checa Karolina Pliskova y avanzar a semifinales en el Abierto de Stuttgart en Alemania.
La que a la postre alcanzó la victoria se recuperó de un quiebre de servicio en el set decisivo, para de este modo comenzar a deshojar la margarita que no pudo hacer en el Abierto de Australia, al quedar eliminada en cuartos de final 1-6, 6-3, 6-2 por la checa Karolina Muchova, mientras la japonesa Naomi Osaka se tituló en Melbourne al vencer 6-4, 6-3 a la estadounidense Jennifer Brady.
Pliskova tenía el servicio y la oportunidad de amarrar la victoria con margen de 5-4 en el tercer set, pero Barty se apuntó cinco break points y convirtió el último de ellos para igualar el marcador. La australiana luego defendió su servicio, dejando a su rival en cero y rompiendo el servicio de su contraria de nuevo, para después asegurar el triunfo con un raquetazo de la checa que terminó demasiado largo.
“Ese fue un partido increíble”, declaró Barty. “Simplemente una batalla muy, muy buena”. El desplome de Pliskova impidió que la checa de 29 años hilvanara tres triunfos consecutivos por primera vez desde que llegó a la final de Roma en septiembre.
Barty avanzó a sus primeras semifinales en cancha de arcilla de este año, después de perder en los cuartos de final en Charleston. Ella se medirá en semifinales a la ganadora del choque entre la ucraniana Elina Svitolina y la checa Petra Kvitova
AJS vía Associated Press
Foto: Ash Barty embalada en el Abierto alemán