El Gobierno de Bielorrusia aseguró que las autoridades actuaron en «pleno cumplimiento de las normas internacionales» al desviar el domingo al aeropuerto de Minsk un avión de la aerolínea Ryanair que volaba de Atenas a Vilna.
Tras desviar este vuelo, las autoridades detuvieron a un periodista crítico con el régimen.
«No cabe ninguna duda de que las acciones de nuestras autoridades estaban en pleno cumplimiento con las normas internacionales establecidas», dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores, Anatoli Glaz.
El portavoz aseguró que el Gobierno podrá «garantizar plena transparencia y, si fuera necesario, aceptar expertos y mostrar todos los materiales a fin de descartar insinuaciones».
Esto luego de las interrogantes que tiene la comunidad internacional sobre el régimen y este desvío de un avión civil sobre territorio europeo.
Sostiene que todo fue hecho bajo el falso pretexto de un aviso de bomba, para detener al periodista opositor Román Protasevich.
El Gobierno dijo que el hecho de que entre los pasajeros hubiera un «extremista» no influyó en la decisión de «ayudar al avión de pasajeros que informó de problemas».
Las autoridades de Bielorrusia crearon una comisión para investigar las circunstancias del desvío del avión.
Una vez concluidas las investigaciones, esperan publicar el resultado de las pesquisas, dijo el Ministerio de Transporte a la agencia rusa RIA Nóvosti.
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