El slugger venezolano Miguel Cabrera, de los Tigres de Detroit, cada vez está más cerca de llegar a 3.000 hits cuando le faltan 69, a seis de 500 los jonrones y a 12 de los 600 dobles en las Grandes Ligas, luego del lunes conectar de 4-2, completar su biangular siete en la temporada, empujar cinco carreras para totalizar 2.931 y anotar en una ocasión para 1.768, a 232 de las 2.000, durante paliza de su equipo 14-0 contra los Rangers de Texas en el Comerica Park ante 13.704 espectadores.
El toletero de 38 años remolcó cinco sin haber dado jonrón, más bien dio un doblete al abridor de los Rangers Kyle Gibson. El 21 de julio de 2008, cuando arrancaba su carrera con Detroit, trajo al plato a su compatriota Carlos Guillén en tres ocasiones.
Desde entonces ha hecho mucho, pero sus partidos más productivos habían incluido al menos un cuadrangular. Tras considerar las distintas maneras de como los Tigres anotan en estos tiempos, sorprende la forma en la que lo hicieron el lunes mediante 14-0 contra Texas en su casa.
DOBLE BARREBASES
El batazo principal del aragïueño fue un doblete barrebases por el jardín izquierdo en el quinto inning, para ampliar el marcador 7-0. Cuando vio que el tiro fue hacia el home, él arrancó hacia la tercera. El receptor Jonah Heim pareció sacarlo out, pero la repetición demostró que había el umpire de tercera se había equivocado porque Cabrera burló el guante de Brock Holt.
Su recorrido de home a tercera fue medido en 13.42 segundos por Statcast, lo más cerca que ha completado un triple desde que sumó uno por última vez en 2016. En la aplastante victoria de los Tigres, la conexión del maracayero fue la más importante de la jornada.
A.J. Hinch, mánager de Detroit, dijo que su doble-triple fue gran swing ante uno de los mejores lanzadores en la Liga Americana, Gibson. “En cualquier momento en el que puedas producir un par de carreras ante un lanzador como Gibson, te dará tranquilidad y confianza de estar en control del juego”. Cabrera regresó al plato en la sexta entrada con las bases llenas. Esta vez, un sencillo que conectó hacia la parte izquierda del terreno produjo otras dos.
NO LA SACA DEL 30 DE JUNIO
El de la Ciudad Jardín no ha dado jonrón desde el 30 de junio en Cleveland y no lo ha hecho en el Comerica Park desde que conectó uno en medio de la nieve en el Día Inaugural del 1 de abril. Su camino hacia los 500 vuelacercas se ha retrasado un poco, pero ha encontrado la manera de producir de otra forma. Batea .303 (de 132-40) desde el 1 de junio con 22 empujadas, pese a sólo sumar tres conexiones de vuelta entera y nueve extrabases a partir de ahí.
PROMEDIO DECENTE
El futuro Salón de la Fama lleva promedio de .292 (de 72-21) en el año con corredores en posición de anotar, para 31 empujadas con apenas cuatro extrabases. Tiene de 12-7 con 16 remolcadas con las bases llenas. La edad le ha quitado la explosividad a su cuerpo, pero su mente le ha permitido mantenerse productivo en las situaciones de apremio.
Los pequeños imparables han incrementado sus oportunidades de ingresar al prestigioso club de los 3,000 hits este año. Es ahora el 38vo en la lista histórica con 2.931, tras empatar y superar al inmortal Rogers Hornsby y a Jake Beckley en la misma jornada. Su próximo indiscutible lo empatará con otro miembro del Salón de la Fama, Willie Keeler.
Hinch está orgulloso del trabajo de Cabrera. “Son instantes importantes para él, para nuestra organización y el grupo de seguidores”, expresó. “Le ha dado tanto a esta franquicia y ahora nos lo recuerda mientras deja en el camino a nombres tan importantes, por lo que Miggy está en esa élite, sin dudas”.
Antonio José Seijas vía Jason Beck de MLB.com
Foto: Miguel Cabrera hace las pequeñas cosas