El aumento del dólar sigue preocupando tanto a comerciantes como a consumidores a la hora de comprar y vender productos. Actualmente, la comida es la primera preocupación del venezolano debido a la crítica situación económica, por lo que muchos buscan la economía en los alimentos pero esto también lo sufren los vendedores.
Tras un recorrido por el centro de Barquisimeto se pudo corroborar que han abierto nuevas locales de comida pero que también hay muchos que han sido cerradas.
Juan Daniel Vivas, dueño de un local que se dedica a vender charcutería, afirmó que «el problema es el aumento del dólar y pareciera que se jugara con la psicología del cliente, funciona así; abrimos un local, ofrecemos productos a un precio justo y «bajo» por la inauguración pero poco a poco tenemos que aumentar porque a nosotros también nos aumentan la mercancía y las personas dejan de comprar cuando ven esto».
«Entendemos la situación pero el cliente también debe entender lo costoso que es mantener un local y lo cara que está la comida. Yo no he cerrado porque mi familia ha tenido esta charcutería toda la vida pero si he sufrido cuando llega nueva competencia«, explicó Vivas.
El comerciante precisó que las personas se acostumbran a los precios pero cuando abren nuevos locales, deben esperar a que este aumente y así recuperar clientela.
Por su parte, Luis Colmenarez, un vendedor que cerró su verdurería hace tres meses dijo que es complicado mantener este negocio «me iba bien pero mi vecino que es productor empezó a vender y claro, mucho más económico que yo, así es difícil competir porque el dólar sigue subiendo. Es que cliente y comerciante sufre el aumento del dólar, es difícil».
Ante este desenfrenado aumento, los comerciantes sienten que es ‘imposible’ obtener ganancias en los productos y hacer la reposición de sus inventarios. Muchos comercios ofertaban sus productos por encima del precio del dólar para no tener que cambiarlo diariamente y esto llevó a los vendedores a poner el costo en divisas y multiplicarlo por el precio del día.
Esto, aunque es lo común «ahuyenta a los clientes» según un vendedor, porque muchos no se acostumbran a los centavos de dólar «entonces ven que un producto cuesta $ 0.57, por ejemplo y piensan que es económico pero cuando lo multiplicas al precio del dólar, se espantan, es que es complicado y a veces hasta gracioso pero es el efecto de este aumento», dijo.
Eliagnis Mora
Foto: Daniel Sosa