La ola de frío polar que se ha instalado desde el martes en el norte de Estados Unidos y el sur de Canadá contabiliza al menos 16 fallecidos.
La mayoría de las muertes se ha registrado en la región central de Estados Unidos, en los estados de Michigan, Illinois, Ohio y Minesota, donde los termómetros se situaron a niveles históricos, como los -30 grados centígrados alcanzados en Chicago el jueves.
Además de los muertos, la tormenta polar ha provocado decenas de casos de congelación de extremidades, especialmente entre personas sin techo.
Un hospital de Chicago ha tratado a medio centenar de personas con síntomas de congelación y algunas sufrirán amputaciones.
Otro número sustancial de las muertes se ha producido a consecuencia de accidentes de circulación dadas las malas condiciones de muchas carreteras, cubiertas con hielo y nieve.
El transporte aéreo también se ha visto afectado por las malas condiciones meteorológicas. Este jueves, 2.300 vuelos fueron cancelados en Estados Unidos y hoy la cifra se ha reducido a 350.
En Chicago la temperatura de este viernes es de -11 grados centígrados, con una sensación térmica de -15 grados.