Pese a que el gobierno ha tomado en los últimos días alguna que otra medida económica que pareciera ir en el camino correcto, no es menos cierto que ya parece muy tarde para ese tipo de rectificaciones, pues debe recordarse que muchas advertencias se le hicieron en su momento, y además desde hace ya muchos años atrás, pero no fue posible que los encargados de esa política económica por parte de este régimen aceptaran las sugerencias o recomendaciones, no solamente nuestras, sino también de los diversos sectores sociales y representativos del país”.
–Es más, casi pudiéramos afirmar, que, hoy en día, los empresarios en Venezuela se han convertido en una clase “vulnerable”, por dramatizarlo de alguna manera.
Quien así se expresó para EL INFORMADOR fue el presidente de la Cámara de Comercio el Estado Lara, Pablo Chirinos, al ser inquirida su opinión acerca del momento que vive la economía venezolana, y, sobre todo, a raíz del último incremento del monto del salario mínimo decretado por el presidente de la república, Nicolás Maduro Moros, y ya en vigencia.
¿Podría citar alguna de esas medidas que, según usted, van en el camino correcto?
–Bueno, por ejemplo, te puedo citar lo de la tasa de las divisas, que va ahora más acorde con lo que es la realidad económica del país, pero, aún así, resulta que se trata de una medida que se vino a tomar cuando ya no hay divisas, porque las hemos gastado todas, y como resulta que lamentablemente nosotros no tenemos la cultura, o la costumbre, de prepararnos para momentos difíciles, sobre todo desde el punto de vista económico, resulta que ahora se requiere de un conjunto de medidas que vayan en el sentido correcto y en el sentido de la recuperación económica del país.
¿Y qué está planteado entonces?
–Está planteado entonces que, si no se refinancia la deuda externa, no vamos a hacer nada, y eso tiene que entenderlo este gobierno, para evitar que siga cometiendo errores cada vez más graves en el plano económico, como lo fueron, por ejemplo, las tales expropiaciones, la regulación de precios, las políticas cambiarias, etc.
–El caso de las expropiaciones de bienes es sencillamente dramático, por decir lo menos, pues casi todas las empresas, grandes o pequeñas, expropiadas por este gobierno, o están quebradas o están cerradas, y una que otra trabajando “a media máquina”, por decirlo de forma compasiva, si se quiere.
-Y en cuanto a los últimos incrementos del monto del salario mínimo, sus resultados están a la vista: Sencillamente, no alcanza para nada, cuestión que no lo digo yo, sino todo el que en este país cobra salario mínimo. Es más, cómo será, que hasta el mismo ministro del Trabajo, Eduardo Piñate, vino hace pocos días a Barquisimeto, con Diosdado Cabello, y declaro a la televisión que “muy probablemente”, el presidente de la república decretaría en los próximos días un nuevo aumento del monto del salario mínimo.
–¿Qué quiere decir eso…? Pues sencillamente que el mismo gobierno sabe que 18.000 bolívares mensuales son un ingreso insignificante en la Venezuela de hoy en día.