Las mesas electorales en los comicios presidenciales de este domingo 21-Nov en Chile, cerraron tras una votación de 10 horas, cuando aún había largas filas de personas.
Centenares de personas hacían largas filas, algunas por varias cuadras, en las afueras de locales de votación, a la espera de que los hicieran entrar al recinto para poder sufragar después del horario de cierre. Muchos ingresaron a los locales, mientras algunos que quedaron afuera gritaban y empujaban rejas para entrar.
Es la primera vez desde la recuperación de la democracia en 1990 en que los candidatos presidenciales con las mayores preferencias en las encuestas están más lejos del centro, lo que ha generado inquietud política y económica.
Si los sondeos de días previos fueran acertados, la sucesión del presidente centroderechista Sebastián Piñera se disputaría entre José Antonio Kast y Gabriel Boric.
El primero, de 55 años, es un admirador de la dictadura militar (1973-1990) que fue cuatro veces diputado por un partido conservador oficialista. El segundo, de 35 años y egresado de leyes, es un exdirigente de las protestas estudiantiles de 2011.
Kast, tuvo que explicar durante su campaña electoral algunas de sus controvertidas propuestas de gobierno, como la que pretende derogar la ley de aborto en tres causales, vigente hace cuatro años, y cavar una zanja en la frontera para impedir la llegada de inmigrantes.
“La zanja es para un control fronterizo”, explicó, y dijo que los inmigrantes indocumentados van a ser invitados a salir o sino, “en algún momento les vamos a poner transporte”, para que retornen a su país de origen.
El ultraderechista —que recientemente dijo que no era un candidato “extremo”— promete recuperar el orden público, achicar el Estado con el despido de 20.000 empleados y rebajar impuestos por hasta 8.800 millones de dólares, entre ellos bajar de un 19% a un 17% el impuesto al valor agregado, el que más recauda; de un 27% a un 17% los gravámenes a las empresas; impuesto cero a las pequeñas empresas y rebajas impositivas a quienes ganen entre 400 y 800 dólares mensuales.
Por su parte Boric, que representa a Apruebo Dignidad, una alianza entre el izquierdista Frente Amplio y el Partido Comunista, propone una reforma tributaria para recaudar 8 puntos del PIB, con más impuestos a los súper ricos, a los ingresos mensuales superiores a los 5.400 dólares, “impuestos verdes” y elevar los tributos a la gran minería del cobre, entre otros, así como eliminar las Administradoras de Fondos de Pensiones, (AFP), criticadas transversalmente porque otorgan bajas pensiones.
El más joven de los siete candidatos también propuso crear un Fondo Universal de Salud para evitar que Chile siga teniendo dos tipos de salud, una de las cuales discrimina por ingresos.
También impulsa una reactivación económica que incluya una subvención al empleo femenino y la defensa de los derechos de la población LGBTIAQ+. Además plantea crear un cupo laboral de 1% en empresas públicas y privadas para personas transgénero.
Los otros candidatos son Yasna Provoste, de centroizquierda; el independiente oficialista Sebastián Sichel, el cineasta progresista Marco Enríquez-Ominami, el izquierdista Eduardo Artés y el economista Franco Parisi, quien compitió desde Estados Unidos por redes sociales.