#EspecialSemanaSanta | Las tradiciones en Venezuela tienen alto sentido familiar, y más aún cuando la Gracia del Señor es el principal motivo de reunión. En esos casos, la oración y los alimentos son símbolos de unión.
En el Táchira, la esencia andina se derrocha cada Semana Santa. El jueves Santo es una de las fechas más esperadas, cuando se celebra la tradición de los siete potajes. La familia entera se reúne para agradecer los alimentos, la hermandad, la salud y la palabra del Señor, previo a la visita a los siete templos, el #ViernesSanto.
Sentados en la mesa de la familia Contreras Castro, ellos me explican que pueden ser más de siete los alimentos, pero nunca menos, y como bien instruye la tradición, deben ser platos fríos, tal como como deben servirse hasta el fin de la Semana Mayor, cuando la norma centenaria rechaza encender brasas y fogones hasta la resurrección del Señor.
Es así como en el retrato de esta tierra de gente cordial, nunca falta una chicha de maíz o cebada, un mazato, pastelitos de yuca, sopa de arvejas o caraotas rojas, yuca y el infaltable #chocheco.
Sinceramente, sentarme en la mesa de una familia tachirense lo sentí como verdadera celebración. Percibí amor al prójimo al ser invitado a compartir esta fecha tan especial, y saber que cada platillo fue preparado en unión y con tal devoción que incluso comenzaron desde el Sábado de Dolores, me hizo reflexionar que las tradiciones sobreviven mientras la familia así lo inculque, lo transmita y lo viva.
@juliourdanetam
Foto: @Iamdanisosa