La FINA (Federación Internacional de Natación) aprobó una nueva normativa que acota la participación de nadadoras transgénero en competiciones femeninas atendiendo a una serie de condiciones.
El mediático caso de Lia Thomas, nadadora transexual que compite para la Universidad de Pensilvania, abrió un debate que la organización no ha tardado en abordar.
Competidora en categoría masculina antes del proceso de reasignación de sexo, Thomas no destacaba por encima del resto. Ahora, a sus 22 años y enfrentándose a mujeres, pulveriza récords del sistema universitario de Estados Unidos y bate marcas de nadadoras olímpicas.
En un documento de 34 páginas, el organismo directivo establece que para que una persona transexual que haya hecho el cambio de hombre a mujer pueda competir en la categoría de su mismo sexo no puede haber pasado la pubertad masculina. Es decir, el tratamiento que se aplica para llevar a cabo el cambio de género debe haberse realizado antes de los 12 años.
No obstante, este no es el único condicionante. Otra de las medidas que las atletas profesionales reclamaban y que la FINA recoge en su nueva normativa es el establecimiento de un límite en los niveles de testosterona permitidos para poder competir en categoría femenina. La cantidad máxima será de 2,5 nanomoles por litro de sangre.
Las nuevas leyes han recibido el apoyo del 71% de las 152 federaciones que forman el Congreso Extraordinario de la FINA. Todo el proceso de votación se fundamenta en estudios científicos que demuestran la superioridad física de mujeres transgénero sobre mujeres cisgénero. El reglamento entra en vigor inmediatamente, lo que significa que Lia Thomas no podrá seguir preparándose para competir en categoría femenina en los Juegos Olímpicos de París que se celebrarán en 2024.
El presidente de la FINA, Husain Al-Musallam, ha expresado tras la sesión celebrada en Budapest su parecer acerca del polémico asunto: «Tenemos que proteger los derechos de nuestros atletas para competir, pero también tenemos que proteger la igualdad competitiva en nuestros eventos, especialmente en categoría femenina».
Con datos de La Vanguardia