No es cuento lo del cubano Yordan Álvarez, porque dio otro jonrón decisivo el jueves 13 de octubre, para los Astros de Houston derrotar 4-2 a los Marineros de Seattle y tomar ventaja de 2-0 en la Serie Divisional de la Liga Americana.
Álvarez comenzó adueñarse de este mes de octubre, y asombra el repunte que ha tenido el poderoso toletero antillano, quien sufrió mucho durante la derrota de Houston ante los Bravos de Atlanta en la pasada Serie Mundial.
En el pasado Clásico de Otoño, en que Atlanta se coronó luego de seis duelos, bateaba sólo para .100 (de 20-2), sin jonrones y con seis ponches. Ahora en dos juegos conecta para .500 con dos jonrones, un doble, 7 empujadas, 3 anotadas. Y ha decidido en dos partidos.
“Lo llamo ‘Grande’”, indicó el mánager Dusty Baker, quien pronunció el mote en español. “Responde a lo grande. Nos encanta tenerlo en el plato. A él le gusta llegar en los momentos grandes. Su concentración y disciplina son notables para la edad que tiene (apenas 25 años)”.
Fue el héroe del primer juego cuando había dos outs en el noveno capítulo, un garrotazo de tres carreras ante Robbie Ray, el último ganador del Cy Young de la Americana. Aquel batazo dio a Houston una victoria 8-7 en un encuentro que los Astros perdían por cuatro.
Ahora todos hablan de él, incluso los periodistas le pidieron que describiera sus virtudes en la caja de bateo. “Yo diría que soy inteligente”, respondió. “Cuando voy al plato trato de visualizar los tipos de diferentes lanzamientos y que podría obtener cuando hago swing. Si todo sale de acuerdo con el plan, el resultado es positivo”. Los Astros están cerca de su sexta Serie de Campeonato consecutiva en el joven circuito.
AP
Yordan Álvarez ahora de qué hablar