Al Chelsea se le agotó la paciencia el domingo con Graham Porter y despidió al técnico inglés cuando el equipo languidece en la parte media de la clasificación de la Liga Premier a pesar de que el club gastó 630 millones de dólares en jugadores en las últimas dos ventanas de transferencia.
El equipo anunció la partida de Potter tras la derrota un día antes por 2-0 ante el Aston Villa, que dejó al Chelsea en la 11ma posición siete meses después de que apostaron por él para remplazar a Thomas Tuchel.
“Tenemos un gran respeto por Graham como entrenador y persona”, aseguraron los dueños del Chelsea Todd Boehly y Behdad Eghbali. “Siempre se condujo con profesionalismo e integridad y estamos decepcionados por el resultado”.
La primera designación de los nuevos dueños estadounidenses les resultó contraproducente. Potter firmó por cinco años a pesar de la falta de experiencia entre los máximos clubes —y con un pasado poco claro, siendo su único título la Copa Sueca en el 2017— y no pudo sacar lo mejor del costoso equipo.
Chelsea ganó sólo siete de 22 juegos de la Liga Premier con Potter y está a 12 puntos de los primeros cuatro y por lo que es poco posible que clasifiquen a la próxima Liga de Campeones. Chelsea perdió ante el Manchester City en ambas copas domésticas, pero llegó a los cuartos de final de la Liga de Campeones para enfrentar al Real Madrid, actual campeón.
Bruno Saltor, integrante del personal de Pottr, asumirá como entrenador interino.
“Graham acordó colaborar con el club y facilitar una transición sin problemas”, dijo el Chelsea.
El próximo encuentro del Chelsea es el martes ante el Liverpool.
AP