El presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, declara este domingo ante los tres fiscales que investigan el controvertido acta de energía firmado entre Paraguay y Brasil, que puso al mandatario contra las cuerdas y al borde de un juicio político.
La declaración tiene lugar en la residencia presidencial de Mburuvichá Roga, en el centro de Asunción, y ante los fiscales Marcelo Pecci, Susy Riquelme y Liliana Alcaraz.
A su llegada a la residencia Pecci dijo a los periodistas que se trata de una declaración testimonial y sin ningún cuestionario, añadiendo que la misma fórmula se seguirá con el vicepresidente paraguayo, Hugo Velázquez, a quien todavía no se le ha fijado fecha para declarar.
La Fiscalía anunció anoche que el presidente declararía esta mañana, cuando el viernes había informado que la próxima semana se notificaría al mandatario, del conservador Partido Colorado, que iba a ser citado ante los tres agentes fiscales encargados del caso.