Anderson Piña Pereira.- El imponente Cerro La Vieja, ubicado en el municipio Simón Planas, a tan sólo 15 minutos de la población de Sarare, ha sido por décadas considerado un patrimonio histórico y ecológico de la entidad larense y el país, debido a su impacto ambiental para los productores agrícolas del norte del estado Portuguesa y suroeste de Lara.
Pero la tranquilidad del impetuoso pulmón vegetal localizado en la serranía del Altar, hoy día se encuentra al acecho de la empresa Corporación Industrial Venelara (Civelca), a nombre del señor Jorge Rodríguez y su hijo Alam Rodríguez, quienes sin autorización han venido realizando movimientos de tierras y engranzonamiento de las vías para tener acceso a las cuevas y minerales no metálicos como piedra caliza, mármol, cerámicas con componente de acero y sílice, utilizadas mayormente en la rama de la construcción, según relata el cronista oficial del municipio Simón Planas, Mario Querales.
40 cuevas se encuentran localizadas en el Cerro La Vieja, según los ecologistas, de las cuales algunas han sido ultrajadas por intereses comerciales.
Pero a Querales no sólo le preocupan los daños ecológicos que podrían ocasionar la extracción de minerales en el Cerro La Vieja, sino también el hecho de que dicha área constituye una zona ancestral debido a que en el lugar existe un cementerio de más de mil indígenas sepultados, así como también un tesoro enterrado por el Negro Miguel, quien fue el primer hombre de color que se alzó contra los españoles durante los años 1550, cuando se formaba el primer asentamiento de Barquisimeto.
Otro de los aspectos que le preocupa al cronista Querales, es que en la montaña hay las aguas subterráneas que abastecen a los productores agrícolas de Simón Planas y Portuguesa, además que dicho cerro es pilar fundamental para el estado y que debe ser respetado como patrimonio cultural, histórico y ecológico y no como un proyecto minero.
En defensa
“Desde hace muchos años se ha venido defiendo el Cerro La Vieja debido al impacto histórico, cultural y ecológico”, así lo manifiesta Yendi Molero, síndico procurador del municipio Simón Planas, quien desde la Cueva La Estefanía, ubicada a unos 600 metros de altura, afirma que dicha montaña ha sido defendida por la señora Carmen García desde los años 90 y en el año 2005 por el exalcalde Naudy Ledezma, quien durante su gestión firmó un decreto de protección con coordenadas, que fue ampliado en los años 2006 y 2007 posteriormente.
Molero explica que en el año 2016, en los alrededores del Cerro La Vieja hubo un atropello a los campesinos y productores de la región, quienes además fueron detenidos por funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) adscritos a la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) quienes pasaron por encima de las autoridades del municipio, algunos pobladores y acusados de
paramilitares.
Además explica que en una reunión entre el Consejo Municipal y el Instituto Nacional de Tierra (INTI), se determinó que esas tierras tenían unas cartas agrarias, que pertenecían al Instituto Agrario Nacional (IAN), por ende el documento señalaba que esos terrenos pertenecían a los productores.
Sería un error
El ecologista Leobardo Acurero sostiene que dar inicio al proyecto minero dañarían la roca calcárea y afectaría las cuencas hidrográficas como bucos y quebradas, especialmente manantiales y aguas subterráneas, ubicadas debajo de la montaña.
“Este gran grupo de cavernas de diversas dimensiones que se comunican entre ellas pueden almacenar tanta agua de lluvia en el período de precipitaciones, que puede emanarla permanentemente como manantiales para formar quebradas que pueden mantener su caudal incluso aunque deje de llover sobre esta zona durante dos y cuatros años seguidos, lo que tendría como consecuencia un daño ambiental, que podría afectar hasta el cambio climático”.
Además señala que otro de los riesgos es que este sistema montañoso alimenta los dos ríos más importantes de la zona como son el río Sarare, el río Cojedes y el importante embalse Las Majaguas con que se mantiene toda una gran producción agrícola en esta zona llanera.
El proyecto minero también afectaría a los casi tres productores que se encuentran en la zona, debido a que el proyecto desalojaría a tres kilómetros a la redonda todo lo que se encuentre a sus alrededores.
SIN PERMISOS
Los representantes de la empresa Corporación Industrial Venelara (Civelca), habrían asegurado tener permisos ambientales y supuestas alianzas con la Gobernación del estado Lara para realizar actividades mineras en el sector, específicamente en el Cerro La Vieja. Sin embargo, extraoficialmente Querales indicó que la referida empresa no posee ninguna alianza con el Gobierno regional para realizar dicha actividad en el sector ni permisología de ninguna índole.