AURA ROSA CASTILLO
Tras el desalojo forzoso, el pasado miércoles, de los comerciantes de El Manteco, ubicado en la calle 32 y 33 entre las carreras 21 a la 25, serán reubicados en el mercado Obelisco, situado en la avenida Las Industrias, al oeste de Barquisimeto. Este viernes se efectuó una reunión entre los afectados y el director de Mercados y Abastecimiento municipales, Aníbal Reyes.
Igualmente, el funcionario se reunió con directivos del mercado Obelisco y se fijó un encuentro para el próximo lunes, con ese propósito se conformó una comisión, informó Víctor Rivero, directivo del referido mercado.
El debate está abierto, “hasta este momento es prematuro hablar de propuestas, nos vamos a reunir para analizar la situación”, al resaltar que en El Obelisco se comercializa sólo ropa mientras que en El Manteco se mercantiliza con víveres, hortalizas y verduras. Eso no es compatible, pero hay que esperar el resultado de las reuniones con todos los que hacemos vida en este mercado.
Rivero precisó que el mercado los conforman 1.116 puestos. En la actualidad, muchos puestos están vacíos, por la misma situación económica que no se estabiliza. Es una economía dolarizada, la hiperinflación es devastadora, la mercancía hoy tiene un precio y mañana otro.
A ello, se suma la falta de dinero en efectivo que nos ha afectado demasiado. Asimismo, la crisis de transporte y la inseguridad. Un alto de porcentaje de comerciantes que compraba su mercancía en Caracas ha sido víctima de delincuentes que asaltan en los autobuses.
Muchos compañeros se han descapitalizado. En este último año la recesión económica ha sido fuerte, detalló.
Antecedente
Relató Rivero que ellos también fueron reubicados tras laborar muchos años en la urbanización El Obelisco, en la calle 57. Eso ocurrió en 1998 durante la gestión de Macario González, como alcalde del municipio Iribarren. “Cuando llegamos eran dos paredes, nosotros levantamos la infraestructura, con mucho esfuerzo”.
Durante un recorrido por el mercado, reporteros de EL INFORMADOR constataron que el tema es controversial con relación a los nuevos trabajadores. Algunos temen que “se trasladen vicios” mientras otros consideran que es bueno porque vendrían a darle “vida al mercado”, actualmente golpeado severamente por la crisis económica. Su operatividad, si acaso llega a 20 %.
Alberto Pineda, trabajador, expresó que el mercado tiene sus normas y estatutos, por los cuales se ha regido.
Coincidentemente, más temprano en la plaza ‘La Mora’, ubicada en la carrera 23 entre calles 23 y 24, una coordinadora de los comerciantes informales, desalojados de El Manteco, advertía sobre las normas de convivencia que deberán asumir una vez ubicados en el nuevo sitio, entre las cuales: mantener limpio el sitio, llevar bolsas para recolección de basura, no vender licor… Al tiempo que los alentaba a ser optimistas en que si “venderán tanto como sucedía en el centro de Barquisimeto…»
Ángel Piña, trabajador, en El Obelisco, manifestó recelo en cuanto a la posibilidad de la reubicación, y pidió “no politizar este caso, porque este espacio lo hemos construido nosotros con esfuerzo y trabajo.
No obstante, Angélica Peña tiene sus reservas con relación a la reubicación de los ‘buhoneros’ de El Manteco en El Obelisco. Dice hay puestos que están solos, pero éstos tienen dueños. Explica que la actividad comercial ha sido seriamente afectada por la falta de dinero en efectivo.
Sin embargo, Ligia Vera tiene ubicado en el área externa del mercado y, ve con buenos ojos la llegada de estos comerciantes, pues reavivaría el mercado, que este último año ha tenido un duro revés. El espacio hoy día tiene tres puestos, cuando llegó a extenderse por cuadra.
Catacumba los recibe
Los trabajadores del mercado a cielo abierto, denominado Las Catacumbas, que funciona en la Zona IndustriaI 1, también fueron ubicados en este sitio luego de laborar frente al mercado Terepaima y en la urbanización Sucre. Ahora trabajan organizadamente y hasta carnetizados y conforman el Sindicato de Trabajadores de la economía informal y similares del estado Lara, (Sintraecin).
Luis Arriechi y Héctor Miranda, integrantes de la nueva junta directiva, manifestaron que han logrado mantener el orden en el sitio de acuerdo con las normas y reglamentos y así se lo hacen saber a quienes ingresen.
Hasta este viernes, 180 comerciantes de El Manteco, habían sido ubicados en el sitio. Hemos sido claros: No se aceptan vendedores de cigarrillos, ni cambio de moneda extranjera, ni venta de dinero, mantener el espacio limpio. Los comerciantes que incumplan los acuerdos serán sancionados con suspensiones y quien acumule tres será expulsado, expresó Arriechi.
En cuanto a la seguridad, dijo que cuentan con el apoyo de la Policía Nacional Bolivariana (PNB). Sin embargo, pidió refuerzo de funcionarios en el sitio. Asimismo, es necesario mayor control del tránsito vehicular.
“Hicieron desastres”
Marlene López, una de los coordinadoras de los ‘buhoneros’ deploró la actuación de la Policía en El Manteco. “Hicieron desastres, toda la mercancía se perdió, golpearon a la gente”. Aseguró que se había hecho un censo y se había hablado para conformar mesas de trabajo, pero decidieron actuar como lo hicieron. Mandaron a las FAES para “atemorizar” a la gente.
Algunos comerciante recordaron que cuando despejaron las aceras frente el mercado Terepaima, la Policía tomo el sitio en la madrugada. No hubo violencia.
Asimismo, cuando fue la Avenida 20 fue desaloja y los buhoneros fueron reubicados en los centros comerciales socialistas. Por cierto, hoy día muchos de los locales están cerrados. En ese entonces, las conversaciones se mantuvieron durante algo más de un año.
Necesitan trabajar
Durante la reunión celebrada este viernes en la plaza La Mora, este viernes, los ‘buhoneros’ dejaron claro que necesitan es trabajar, tras ser desalojados “arbitrariamente”.
Yolimar, así se identificó, admite que en El Manteco sucedían cosas fuera de ley, pero los buenos somos más. “No se puede combatir la anarquía con tiranía. Fue horrible tanta humillación, a quienes venden arepas los funcionarios de las FAES se las quitaron y se las comieron delante de ellos. Igual sucedió con los vendedores de pepito, relataron.
“Todos andamos haciendo algo para comer, esa situación es a escala nacional, al gobierno se le escapó el país de las manos. Allí hubo maltrato y abuso de poder”, afirmó.
Jesús Morales dijo que desconoce el paradero de su mercancía y perdió la esperanza de recuperarla es perecedera y cayó en manos de la policía. Tengo cuatro hijos que mantener.
Entretanto, Mairelis Rodríguez afirma que un tostonero, que es mi cliente, viene del estado Yaracuy a comprar mercancía y se lo llevaron preso. Como él, muchos pequeños comerciantes adquirían sus productos y luego lo ofrecían en bodegas o puestos improvisados.
Denuncia que los funcionarios de seguridad violan los derechos humanos, los detenidos han sido golpeados, dijo al tiempo que aboga por Brasil Álvarez y por Anzoni Monsalve. Asegura que son inocentes.